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colaborador
Voto de Quique Mex:
553
Drama
Biopic del diseñador francés Yves Saint Laurent (1936-2008), en especial durante sus años jóvenes, en los años 60 y 70, y su ascenso al olimpo de la alta costura. (FILMAFFINITY)
26 de julio de 2015
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
La figura del famoso diseñador francés Yves Saint Laurent se ha vuelto recurrente en los últimos años en el ámbito cinematográfico, en 2014 dos importantes proyectos se realizaron teniendo como figura central la del icónico diseñador, siendo dispar el resultado final.
La versión de Jalil Lespert es una biopic en toda la extensión de la palabra, recorre prácticamente toda la vida de su personaje y contando con la bendición de Pierre Bergé, el socio y pareja de Yves Saint Laurent, lo pone a éste casi como un redentor y gran impulsor de la carrera de Yves, resultando en una película superflua e inofensiva.
En las antípodas se encuentra el film de Bertrand Bonello, un realizador obstinado y riguroso que suele realizar películas fascinantes e inquietantes y que encuentra en la figura de Yves Saint Laurent a un personaje a la medida de su cine.
Centrándose en un período de su vida que va del año 1967 a 1974, por los que realizará un recorrido de idas y vueltas en el tiempo, el filme muestra y desmitifica la figura del diseñador en medio de momentos lo mismo creativos que en plenas lagunas y crisis, rodeado de figuras emblemáticas de la época y de sus amigos cercanos, así como de, siempre, alcohol y drogas en fiestas interminables.
Como contraparte se presenta la figura de Bergé, acá interpretado por el actor belga Jérémie Renier, como el obsesivo y controlador pareja y socio del diseñador, y a su grupo de amigos donde se destaca la presencia de la bella Léa Seydoux.
La película de Bonello muestra diversos pasajes de la vida de Saint Laurent de manera elegante y seductora, a manera de viñetas que muestran la peculiar forma de vida del diseñador, como ejemplo el brillante momento en que Saint Laurent atiende a una clienta que interpreta la siempre efectiva y hermosa Valeria Bruni-Tedeschi.
Pero entre los excesos, las idas y vueltas y el alargamiento del metraje, el último acto se siente un tanto cansino y reiterativo, aunque a final de cuentas Bonello consigue un film que fascina y atrapa mostrando elocuentemente, pleno de detalles y con recursos puramente cinematográficos, la peculiar vida de éste icónico personaje.
http://tantocine.com/saint-laurent-de-bertrand-bonello/
La versión de Jalil Lespert es una biopic en toda la extensión de la palabra, recorre prácticamente toda la vida de su personaje y contando con la bendición de Pierre Bergé, el socio y pareja de Yves Saint Laurent, lo pone a éste casi como un redentor y gran impulsor de la carrera de Yves, resultando en una película superflua e inofensiva.
En las antípodas se encuentra el film de Bertrand Bonello, un realizador obstinado y riguroso que suele realizar películas fascinantes e inquietantes y que encuentra en la figura de Yves Saint Laurent a un personaje a la medida de su cine.
Centrándose en un período de su vida que va del año 1967 a 1974, por los que realizará un recorrido de idas y vueltas en el tiempo, el filme muestra y desmitifica la figura del diseñador en medio de momentos lo mismo creativos que en plenas lagunas y crisis, rodeado de figuras emblemáticas de la época y de sus amigos cercanos, así como de, siempre, alcohol y drogas en fiestas interminables.
Como contraparte se presenta la figura de Bergé, acá interpretado por el actor belga Jérémie Renier, como el obsesivo y controlador pareja y socio del diseñador, y a su grupo de amigos donde se destaca la presencia de la bella Léa Seydoux.
La película de Bonello muestra diversos pasajes de la vida de Saint Laurent de manera elegante y seductora, a manera de viñetas que muestran la peculiar forma de vida del diseñador, como ejemplo el brillante momento en que Saint Laurent atiende a una clienta que interpreta la siempre efectiva y hermosa Valeria Bruni-Tedeschi.
Pero entre los excesos, las idas y vueltas y el alargamiento del metraje, el último acto se siente un tanto cansino y reiterativo, aunque a final de cuentas Bonello consigue un film que fascina y atrapa mostrando elocuentemente, pleno de detalles y con recursos puramente cinematográficos, la peculiar vida de éste icónico personaje.
http://tantocine.com/saint-laurent-de-bertrand-bonello/
