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Voto de Grandine:
4
29 de mayo de 2008
37 de 86 usuarios han encontrado esta crítica útil
Dicen que Harold y Maude es una comedia de humor negro bastante graciosa. Y yo pienso que qué habrá hecho el humor negro para que lo traten así, a la par que opino que sí, sería graciosa, si el reparto enterito se hiciese el harakiri en el min. 5. Por desgracia no es así.
Lo cierto es que entre su amplio abanico de humor negro, no sabría con que secuencia quedarme. Si con la que Harold finge su suicidio por primera, por quinta o por decimonovena vez y mata de asco al espectador, de paso. Variopinto guión y variopintas situaciones, sin lugar a dudas.
De todos modos, comprendo que resulte complicado realizar una película cuando no tienes algo primordial: El guión, y la basas en una relación de autocompasión por ver cual de sus dos protagonistas es más rarito y está más p'allá. Eso sí, no me esforzaré demasiado en diseminar cual de los dos acapararía el libro Guiness de los records antes, puesto que sino aun batiría yo uno: El mayor sucidio masivo de neuronas de una sola tacada.
Encabezar el reparto con un chaval que lo podría haber bordado, si hubiese sido fichado para interpretar a Terminator, claro, y con una señora muy mayor ella que parece que se haya tomado unos cafés de más, a lo único que ayuda es a que no nos creamos absolutamente nada de lo que se nos cuenta: Ni desde una vertiente surrealista, ni humorística, ni jocosa, ni realista, ni nada, porque en efecto, señores: No tienen puta gracia por más que se esfuercen en intentar tenerla.
Bonita banda sonora, y esas cosas que se suelen decir cuando se le regalan puntos a abortos de tamaño nivel. Eso sí, por final horrible, que no quede.
Lo cierto es que entre su amplio abanico de humor negro, no sabría con que secuencia quedarme. Si con la que Harold finge su suicidio por primera, por quinta o por decimonovena vez y mata de asco al espectador, de paso. Variopinto guión y variopintas situaciones, sin lugar a dudas.
De todos modos, comprendo que resulte complicado realizar una película cuando no tienes algo primordial: El guión, y la basas en una relación de autocompasión por ver cual de sus dos protagonistas es más rarito y está más p'allá. Eso sí, no me esforzaré demasiado en diseminar cual de los dos acapararía el libro Guiness de los records antes, puesto que sino aun batiría yo uno: El mayor sucidio masivo de neuronas de una sola tacada.
Encabezar el reparto con un chaval que lo podría haber bordado, si hubiese sido fichado para interpretar a Terminator, claro, y con una señora muy mayor ella que parece que se haya tomado unos cafés de más, a lo único que ayuda es a que no nos creamos absolutamente nada de lo que se nos cuenta: Ni desde una vertiente surrealista, ni humorística, ni jocosa, ni realista, ni nada, porque en efecto, señores: No tienen puta gracia por más que se esfuercen en intentar tenerla.
Bonita banda sonora, y esas cosas que se suelen decir cuando se le regalan puntos a abortos de tamaño nivel. Eso sí, por final horrible, que no quede.