Media votos
6,4
Votos
2.030
Críticas
1
Listas
1
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
- Sus redes sociales
-
Compartir su perfil
Voto de Nefertrip:
8
![](https://filmaffinity.com/images/myratings/8.png)
6,8
17.993
Drama
Frida (Laia Artigas), una niña de seis años, afronta el primer verano de su vida con su nueva familia adoptiva tras la muerte de su madre. Lejos de su entorno cercano, en pleno campo, la niña deberá adaptarse a su nueva vida. (FILMAFFINITY)
Seleccionada por España para los Oscar 2018.
Seleccionada por España para los Oscar 2018.
8 de julio de 2018
3 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cotilleando brevemente la sección de críticas de la película me he sorprendido con la cantidad de mensajes negativos que se ha llevado. Hay un calificativo que se repite una y otra vez: Aburrida. Me temo que gran parte del público no ha entendido la intención de la película, ni lo bien que plasma sus intenciones sin pecar de pretenciosa (cosa que no es realmente difícil que suceda en temas tan delicados). Es una lástima, pero entiendo que si uno pasa todo eso por alt, se lleve una mala impresión del film, ya que Verano 1993 pone todo su empeño en transmitir unas sensaciones que son, en esencia, el 99% de la película.
Verano 1993 habla de la pérdida. Habla de la muerte. De la muerte de la madre de una niña pequeña cuyo nombre es Frida y que se ve obligada a adaptarse a una nueva vida con su familia, que ahora se hará cargo de ella. Sin embargo no nos lo dice directamente, hay que sumergirse en la película y intentar descifrar las emociones y pensamientos que irán apareciendo por la cabeza de Frida.
Verano 1993 habla de la pérdida. Habla de la muerte. De la muerte de la madre de una niña pequeña cuyo nombre es Frida y que se ve obligada a adaptarse a una nueva vida con su familia, que ahora se hará cargo de ella. Sin embargo no nos lo dice directamente, hay que sumergirse en la película y intentar descifrar las emociones y pensamientos que irán apareciendo por la cabeza de Frida.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Creo personalmente, que la clave para comprender la verdadera intención de las imágenes cotidianas que se nos muestran son los accidentes que tiene Frida con su ahora nueva hermana pequeña, que si bien son pequeñas chiquilladas, terminan por poner en peligro la vida de su hermana y desencadenan una reacción que hasta el momento no habíamos visto: Miedo. Rabia. Rechazo por sus actos que, como recrimina el padre a Frida directamente, han puesto en peligro la vida de su hermana. Y esto es realmente interesante, porque hasta ahora la película ha esquivado el tema. Tanto Frida como la familia menciona el tema de la muerte de su madre de forma muy breve y sin emotividad alguna. Frida no muestra ninguna respuesta ni emoción de forma directa al tema, no al menos más allá de la frustración y desdén que se ven en algunos de sus actos mientras se adapta su nueva vida.
Y por si teníamos alguna duda, son los últimos minutos ya de la película la que nos lo deja claro. Primero con la escena en la que vemos a Frida y su nueva madre, esta vez por fin hablando de forma sincera sobre la muerte de su madre, un tema que hasta ahora había sido totalmente ignorado tanto por la familia de Frida como por ella misma. Este momento es realmente mágico. Y tras él, viene el clímax. Efectivamente, se trata de la escena final, en la que Frida rompe a llorar tras una situación en la que no viene a cuento de nada, esta vez por fin exteriorizando sus sentimientos y abandonando su caparazón. Un llanto sincero y desgarrador de una cría que tras una serie de acontecimientos, quizás haya entendido por fin, y nosotros los espectadores junto a ella, la fría y amarga sensación que nos lleva acompañando desde el inicio de la película: La pérdida.
También destacaría, que aunque quizás en segundo plano, la película hace también mucho énfasis en el esfuerzo y la carga que suponen para su nueva madre adoptiva el criar a una niña que acaba de perder a su madre, que además, igual que la niña y que todo el reparto entero, hacen un trabajo en excelente en sus actuaciones y que es rematado por una fotografía realmente preciosa, llena de calor y sentimiento, que consigue capturar la belleza del campo y de lo cotidiano.
Verano 1993 es, probablemente, lo mejor que nos ha dado el cine español estos últimos años. Una especie de sucesora espiritual (y que de hecho, al menos a mí personalmente, ha conseguido cautivarme más) de lo que en su momento fue "Cría cuervos...". Cine que nos habla de la inocencia de los niños y de la muerte, sin tapujos, sin dramatismos, sólo con la sinceridad que unos ojos inocentes pueden tener.
Y por si teníamos alguna duda, son los últimos minutos ya de la película la que nos lo deja claro. Primero con la escena en la que vemos a Frida y su nueva madre, esta vez por fin hablando de forma sincera sobre la muerte de su madre, un tema que hasta ahora había sido totalmente ignorado tanto por la familia de Frida como por ella misma. Este momento es realmente mágico. Y tras él, viene el clímax. Efectivamente, se trata de la escena final, en la que Frida rompe a llorar tras una situación en la que no viene a cuento de nada, esta vez por fin exteriorizando sus sentimientos y abandonando su caparazón. Un llanto sincero y desgarrador de una cría que tras una serie de acontecimientos, quizás haya entendido por fin, y nosotros los espectadores junto a ella, la fría y amarga sensación que nos lleva acompañando desde el inicio de la película: La pérdida.
También destacaría, que aunque quizás en segundo plano, la película hace también mucho énfasis en el esfuerzo y la carga que suponen para su nueva madre adoptiva el criar a una niña que acaba de perder a su madre, que además, igual que la niña y que todo el reparto entero, hacen un trabajo en excelente en sus actuaciones y que es rematado por una fotografía realmente preciosa, llena de calor y sentimiento, que consigue capturar la belleza del campo y de lo cotidiano.
Verano 1993 es, probablemente, lo mejor que nos ha dado el cine español estos últimos años. Una especie de sucesora espiritual (y que de hecho, al menos a mí personalmente, ha conseguido cautivarme más) de lo que en su momento fue "Cría cuervos...". Cine que nos habla de la inocencia de los niños y de la muerte, sin tapujos, sin dramatismos, sólo con la sinceridad que unos ojos inocentes pueden tener.