Aunque es más famosa su obra El portero de noche, creo que La piel es la mejor película de la Cavani, una autora no demasiado prestigiosa por su tendencia a la exageración y al morbo, al tiempo que a una puesta en escena más bien escueta. Sin embargo, esto último es de lo más logrado aquí, donde las calles de la decadente Nápoles y el caos tras la ocupación aliada son expuestas con maestría por la directora.
Durisima, exceso de morbo y sordidez, pero refleja muy bien lo que dejan tras de sí las guerras, sobre todo las desencadenadas en Europa, en concreto en Italia, donde el propio autor de la novela inspiradora (Curzio Malaparte, de interesante biografía) deja explícitamente al descubierto: violencia, pasiones, fanatismo,nacionalismo, ambición... lo que llevó al Fascismo.
Muy influida por Pasolini y por el último Fellini en escenas puntuales.
Especial atención al autor del libro en el que se inspira, Curzio Malaparte, que aparece como personaje en el film.