Epílogo a 50 años de factoría Bond, el final de un ciclo con casi 25 films a cuestas, y el comienzo de otro nuevo, con la anunciada "Spectre" en la línea de salida.

Este nuevo Bond, interpretado por Daniel Craig tiene visos de iniciar una nueva y gran etapa del personaje, que envejecerá como los buenos whiskys en su barrica de roble, con todo el aroma a lo añejo y con el sabor inconfundible una vez decantado y oxigenado.

Buena película, donde nos descubre los orígenes de Bond y centrado en el personaje de M, de una gran señora como Judi Dench que en mi opinión es la mejor intérprete del personaje, y donde Sam Mendes, encargado de su dirección, nos enseña el camino de las siguientes producciones y nos presenta a los personajes recurrentes del Mi6.

Notable película para conmemorar esos 50 años, y para ello han elegido a uno de los mejores villanos, sino el mejor que dejará profunda huella, nuestro magnífico Javier Bardem, todo un personaje. Un 8 y esperando degustar el primer sorbo de la nueva etapa con "Spectre".