Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Antonio Morales:
5
Ciencia ficción. Romance. Drama En un futuro cercano, Theodore, un hombre solitario a punto de divorciarse que trabaja en una empresa como escritor de cartas para terceras personas, compra un día un nuevo sistema operativo basado en el modelo de Inteligencia Artificial, diseñado para satisfacer todas las necesidades del usuario. Para su sorpresa, se crea una relación romántica entre él y Samantha, la voz femenina de ese sistema operativo. (FILMAFFINITY)
8 de septiembre de 2016
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Spike Jonze es un cineasta que suele tener ideas atractivas y originales, pero que a la hora de llevarlas a la práctica termina defraudando por su inconsistencia cinematográfica. Sus obras quedan al final en meros esbozos, en guiones sin recorrido, proyectos sin profundizar en temas de inminente actualidad como el que aborda en esta ocasión: se trata del uso abusivo de la tecnología, la excesiva dependencia del medio digital, la creciente dificultad del ser humano para relacionarse con otros de su especie. La deshumanización del individuo es alarmante por el uso indiscriminado de una tecnología que nos aísla, volviéndonos intolerantes, egoístas e insolidarios, además de unos seres frustrados, en lugar de aprender a relacionarnos con los demás.

A estas alturas, la película ha sido comentada y valorada por cientos de usuarios, he leído multitud de teorías más menos acertadas, algunas… ¡delirantes!, cuando creo que lo que plantea la película es bastante sencillo, simplemente reflexiona sobre las personas en relación con su entorno, utilizando la audaz idea de que tenga que ser un sistema operativo dentro de una maquina, la que cumpla nuestra aspiraciones vitales y sentimentales para sentirnos felices, algo que en el fondo resulta patético. El resultado es la soledad y el hastío de esta sociedad interconectada del siglo XXI, una sociedad súper informada de temas banales, cuando no estúpidos, como el caso de las redes sociales en las que publicamos nuestras vidas descuidando nuestra privacidad, más aún cuando nuestra información es manejada para uso comercial.

“Her” es la historia de un hombre herido por un fracaso matrimonial, aterrorizado por sus problemas para relacionarse con las mujeres, es por eso, por lo que recurre a una falsa ilusión, atraído por la publicidad, para sentirse bien consigo mismo. Tener una aventura sentimental con un ente digital me parece tan pretencioso como ridículo, pero al cineasta le sirve para abrir el debate al que he aludido y titula mi comentario. Su fotografía de tonos color pastel nos propone una ilusión, una posibilidad de amor cibernético y futurista que en el fondo es descabellada y absurda.

Algunos usuarios no ven necesaria la fisicidad del amor, lo encuentran incluso más romántico, otros quizás, un tanto melancólico y los acérrimos hablan de obra visionaria, de sentimientos etéreos sin argumentar realmente, cuál es el mérito que le atribuyen a la obra para tanto elogio. Yo no encuentro calidez, ni emoción, ni emotividad, todo es previsible, impostado y aburrido. La verdad es que cuesta empatizar con un tipo tan gris y mediocre como este Theodore (Joaquin Phoenix), un autentico muermo, sólo una Samantha artificial (con la voz sensual y carnosa de Scarlett Johansson) es capaz de entender y soportar a este tipo, y no por mucho tiempo.
Antonio Morales
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow