Promesa al amanecer

Una vez más, mi más sincera admiración hacia el cine francés, capaz de contar historias apasionantes, sin perder el humanismo y sin renunciar a virtudes técnicas -como puede comprobarse en sus logradas escenas bélicas- que nada tienen que envidiar a las de las películas hollywoodienses de presupuestos millonarios. Una de las estrellas emergentes francesas del momento, Pierre Niney -se va haciendo un nombre gracias a películas como El hombre perfecto (Un homme idéal, Yann Gozlan, 2015, FRA) y Frantz (Idem, François Ozon, 2016, FRA)-, encarna al escritor Romain Gary en esta adaptación de su novela autobiográfica, construida a base de largos flashbacks que recorrerán su turbulenta vida desde su infancia hasta su óbito. Llama la atención que a pesar de ser una autobiografía, los principales focos no recaigan sobre la misma persona, sino que representa un auténtico esalzamiento a todas las madres del mundo y en particular a la suya -interpretada por una sublime Charlotte Gainsbourg, siempre rígida, estricta y entregada a él; auténtica protagonista de este homenaje a la figura materna.

El veterano actor, director y guionista Eric Barbier nos presenta su último trabajo, una conmovedora adaptación de una novela autobiográfica. La cinta estuvo nominada a cuatros premios Cesar en su última edición.

La película nos cuenta la biografía de Roman Gary, un hombre que durante su vida tuvo muchas ocupaciones, fue hombre de letras, guionista, director, aviador, jurista y diplomático. Pero la historia aparte de todo esto, se centra mayormente en relación que tuvo con su madre, como lo manipulaba y lo llevaba por donde ella quería.

La cinta se va desarrollando en varios tramos, narra su complicada infancia en Polonia, pasando por la odisea que tuvieron que sufrir hasta que llegaron al sur de Francia y sobre todo también queda muy bien reflejada su etapa como aviador en las fuerzas aéreas galas en África durante la II Guerra Mundial.

Con un guión bastante bien desarrollado, la historia fluye en todo momento, con escenas bien dirigidas y sobre todo con una gran actuación de los dos actores protagonistas. Cabe destacar por encima de todo el papel de Charlotte Gainsbourg.

La Puesta en escena y los lugares elegidos para su desarrollo ayudan mucho a que la cinta funcione, sobre todo el director nos quiere mostrar aquellas oportunidades perdidas que recordamos durante nuestra vida.

Pese a su larga duración es muy entretenida y en ningún momento se pierde el interés por ella, gustará a todo tipo de público y sobre todo a aquellas personas que no conozcan a este escritor ganador en dos ocasiones del premio Goncourt (Premio literario francés).

Lo mejor: Charlotte Gainsbourg y la historia que nos cuenta.
Lo peor: Algún actor secundario que no aporta nada.

Pueden leer esta crítica con imágenes y contenidos adicionales en: http://www.filmdreams.net

Biopic del escritor judío-lituano Romain Gary (Roman Kacew) sin padre reconocido huyó con su madre a Francia donde se crió. Participó en la segunda guerra mundial como piloto donde consiguió condecoraciones como héroe de guerra, allí fue donde escribió su primera novela exitosa "Educación europea" logró ser aparte de escritor, diplomático en la ONU y cónsul de Francia. Realizó incluso dos películas como director protagonizadas por la actriz norteamericana Jean Seberg, que fue su mujer, todo un icono de la nouvelle vague pero una persona frágil y depresiva que acabó con su suicidio en 1980. Algo que tampoco superó Romain Gary suicidándose 16 meses después.

La película solamente nos cuenta su historia basándose en su libro "La promesa del alba" de 1960 en el que narraba hasta el final de la guerra y lo que le marcó la relación y muerte de su madre. no apareciendo nada de lo que he contado anteriormente, aun así queda una historia fascinante y absorbente.

Ya existía una película anterior basada en la novela del mismo título rodada por Jules Dassin en 1970 y con Melina Mercouri de protagonista. En esta ocasión el director es Eric Barbier quien dijo en una entrevista que tuvo en mente la película de Arthur Penn "Pequeño gran hombre"para relatar el desarrollo de la historia por tener un recorrido tan largo en el tiempo, Barbier construye una buena nueva versión de dos horas y cuarto de duración que no llega a hacerse pesada, con una estupenda fotografía de Glynn Speeckaert (Madame Marguerite, La fuente de las mujeres) en un rodaje de varios meses en cinco países.

Para dar vida al escritor en su etapa adulta está Pierre Niney (Jacques Cousteau, Frantz) y Charlotte Gainsbourg como su protectora madre, dos papeles muy bien llevados con el correspondiente envejecimiento de ambos.

Un buen resultado para una película muy efectiva ,bien realizada y conmovedora
Destino Arrakis.com

Como habrán podido ver en la ficha técnica la película se basa en la autobiografía de Romain Gary, ‘La Promesse de l’aube‘ [1960], quien fue un notable escritor [dos Premio Goncourt] y diplomático francés de origen judío-lituano.

En general, este genero no me suele defraudar, sobre todo si está realizada correctamente y el personaje tuvo una vida interesante y singular. Pues bien, este es el caso.

Si a eso le añadimos que el guión, adecuadamente adaptado por el propio director, Éric Barbier [con la ayuda de Marie Eynard], mantiene el interés y la tensión suficiente; la interpretación -en particular de Charlotte Gainsbourg y Pierre Niney– es académica y tanto el diseño de producción [Pierre Renson] como el vestuario de época [Catherine Bouchard] son nominables, qué duda cabe de que tenemos garantizado un rato agradable, aunque en algunos momentos resulta excesivamente larga [130 minutos son demasiados].

El propósito de la producción es evidente: evitando, en lo posible, cualquier comparación con el biopic que, sobre el mismo escritor y con el mismo título, en 1970 realizó Jules Dassin, se trata de realizar un largometraje familiar, entretenido, histórico y con esas grandes dosis de patriotismo que los franceses tanto valoran y que tanto hecho yo en falta en nuestro país.

Estamos, pues, ante un cine académico, de base literaria, con cuatro nominaciones a los Cesar 2018 [ver ficha técnica], que cuenta la profunda y compleja relación edipica entre Romain Gary y su madre, que se ha llevado a la pantalla sin aspavientos ni excesiva aristas que pudieran dificultar los preceptivos permisos de la familia del escritor.

El objetivo está conseguido, aunque eso le resta frescura, como también una fotografía que resulta un tanto flácida y una banda sonora que, siendo grata, tiene muy poco de original y mucho de valiosa incorporada, en especial la de Max Richter. Tampoco ayuda la parte rodada en Marruecos, desde luego.

Así que, desgraciadamente consolidada la mala costumbre española de que en verano desaparezca el cine de calidad, ésta es una película que se puede disfrutar con la familia en versión original subtitulada.

Francia sigue sabiendo hacer ese buen un cine histórico-patriótico que tanta falta nos hace a tantos [7 sobre 10]

El quicio de la mancebía [EQM]
https://elquiciodelamancebia.wordpress.com/2018/09/01/promesa-al-amanecer-francia-2017-de-eric-barbier/

La verdad es que no entiendo las frías críticas profesionales ni las tibias opiniones aquí expresadas.

A mí me ha parecido todo un peliculón, con una historia fascinante, interpretaciones convincentes, ambientaciones perfectas en tres continentes distintos y un final que te deja con un nudo en la garganta, qué más se puede pedir.