Rituals

He aquí una mala copia, del gran éxito de John Boorman de los setenta, “Deliverance” (1973),y que incluso en España su distribución acuño el título de “Deliverance 2” con toda desfachatez…cuando no tiene nada que ver con la original…solo comparten la trama en la que esta “Rituals”, copia de muy mala manera el film de John Boorman.
El film se mueve en un trama absolutamente similar al film de Boorman, casi gemelas, pero con la diferencia de que en este, los diálogos son absurdos, las situaciones casi de risa cuando no debería y el desarrollo es lento hasta la extenuación. Por no hablar de unas más que mediocres actuaciones de los actores. Hay escenas que en las que uno se pregunta, si el montador o el director las vieron después de editar el film o simplemente les dio igual el resultado, y la dejaron así. Porque por ejemplo la escena de cruzar el río al principio de la película es alucinante…me dejo atónito tanta lentitud para que no pasase….NADA!!. Es como si me pongo yo con una videocámara a ver como pasan mis amigos un riachuelo y para eso tardo cinco minutos entre las carcajadas de mis colegas…y comentarios ridículos. Una vez visto el film totalmente, a uno le asaltan muchas preguntas, como por ejemplo una vez descubierto el porque de la persecución y asesinatos del grupo de excursionistas, como sabe el perseguidor, el oficio de los susodichos…en fin…un despropósito tras otro.
Lo único salvable es el hoy ya veteranísimo, Hal Holbrook, (Los jueces de la ley,1983), en uno de sus primeros trabajos como protagonista. Lawrence Dane (Zona de guerra: el parque, 1986), le acompaña en un papel de lo más estrambótico, al igual que el también ya veterano Robin Gammell, visto muy recientemente en “Skyline” (2010) de los hermanos Strause. Dirige el entuerto el ignoto Peter Carter, que aun no contento con perpetrar esta seudocopia se atrevió con otra más en “Convoy II” (1978). Su brevísima carrera habla por si sola.
Película perfectamente olvidable y prescindible.

Pobre, densa. chapucera, oscura, sucia, plomiza, descuidada, soporífera, pobre, insulsa, lamentable, bochornosa Re e insoportable producción que sigue los esquemas de grupo de excursionistas aventureros, ven como su paseo aventurero, se convierte en una auténtica pesadilla de la que harán todo lo posible por sobrevivir en un entorno salvaje y lleno de peligros.
Pobre y descuidada calidad de imagen y sonido, acompañados por unas interpretaciones endebles e insultantes que no consiguen despertar la simpatía del público.
Resulta complicado salvar algo de una película tan densa y soporífera en la que el paso del tiempo, se convierte en una misión imposible.
El manejo de los tiempos por parte de sus responsables, llegan a resultan insoportables, cayendo en la reiteración de situaciones y debates existenciales entre los protagonistas, haciendo que llegue a resultar muy aburrida.
La calidad de la iluminación en algunos pasajes resulta insultante, haciendo que lo que podría quedar como un bello paisaje, caiga en algo que se antoja demasiado oscuro y confuso para su visionado.
No tengo muy buenas palabras para esta película que no ofrece nada realmente novedoso y que se convierte en un ejercicio de paciencia para llegar a su desenlace.
No la recomiendo para nada que no sea echar la siesta.
Si estás leyendo esta crítica que estoy dejando, sólo te puedo hacer una recomendación, escapa de esto como puedas!

Un grupo de médicos, deciden ir de excursión "into the wild", al norte de Ontario, y luego de aterrizar en aquel lugar, y acampar la primera noche, comenzarán a padecer, de una omnipresente amenaza!
Una peli cruda, dramática y angustiante, que se pone atrapante, desde su segundo acto, y que irá en alza,la subida de tensión e incertidumbre, con una atmosfera realista, y que te imprimirá, toda la amargura, en éste entorno de condenados!
Una puesta en escena inmersiva, mostrando la profundidad selvática, y aquellos entornos salvajes, difíciles de atravesar.

Estamos ante una "explotation", un tipo de producto de serie B abundante durante los 70/80. Las similitudes con "Deliverance" son más que evidentes, algo parecido a lo que "Las colinas tienen ojos" supone respecto a "La matanza de Texas" (la obra seminal inspira a otra de menor calidad pero con ciertas señas de identidad). Incluso uno de los personajes recuerda al de Ned Beatty en aquella. Cinco amigos van de pesca a los agrestes bosques de Ontario y un enemigo invisible les ataca (visualizado en cámara subjetiva y/o siluetas recortadas en el horizonte). Los excursionistas no conocen el terreno y la sensación de amenaza es constante, están atrapados y alguien les quiere dar caza. La fotografía, de colores terrosos, apagada y algo oscura, no saca partido de los escenarios naturales, se supone que por razones presupuestarias. Los aceptables efectos son de Carl Fullerton en uno de sus primeros trabajos (lograría notoriedad en Hollywood con sus trabajos para "El silencio de los corderos" o "Philadelphia"), y al final cuando conocemos la identidad de los depredadores tiene su pase (todo un precedente a los vistos en "Wrong Turn"). El reparto no es conocido salvo por Hal Holbrook (inolvidavle como "garganta profunda" en "Todos los hombres del presidente" y nominado al Óscar por "Hacia rutas salvajes"), un sólido secundario que hace creíble la agonía de su personaje. Como apuntaba su factura feista puede alejar al espectador, pero es una eficaz muestra de cine de supervivencia, y sin llegar al nivel de "La presa" (1981), sí esta por encima de otros sucedáneos como "Pánico antes del amanecer" (1981), "Trapped" (1982) o "La sangre del cazador" (1987). Para los amantes de los terrores rurales con marca B.