Protagonizada por Radolph Scott, este desenfadado western cuenta la historia de un pueblo gobernado mezquinamente por tres hermanos. Buchanan (un soldado de fortuna solitario pero con bien humor) se mete en líos por intentar hacer justicia cuando quieren ahorcar a un mexicano.

Budd Boetticher, gran director de western de clase B, maneja el film muy bien, a pesar de que el guión es bastante previsible (véase el spoiler). Aunque también tiene buenos momentos, como el funeral en el árbol o el final.

La recomiendo, ya que está un pasito por encima de muchos westerns de clase B.

Película alemana rodada en el Amazonas que, al igual que Apocalypse Now años después, pretende narrar el descenso a la locura de la mente humana.

La nota media de la película está algo sobredimensionada debido a los números críticos intelectualoides que ven poesía donde no la hay. Y es que hay varias escenas que le quitan seriedad al film y que chocan con el ambiente sombrío que pretende: (la cabeza que sigue hablando después de ser decapitada y "Están de moda las flechas largas).

El ritmo de la película es lento y puede llegar a aburrir. Sobre todo debido a que la hipnotizante BSO hecha con sintetizador está ausente en muchos momentos, oyéndose sólo los sonidos del río.

En cuanto a los actores el peor sin duda Ruy Guerra. Y Klaus Kinsi, bueno, al estar enfadado con el director debió pensar que mirar con mala cara a todo el mundo servía para interpretar el papel.

Me gustaría cerrar la crítica comentando la relación incestuosa entre padre e hija. Se ve por primera vez en una muy buena escena de presentación de los personajes, pero no se plasma claramente hasta el final. El resto de escenas podrían ser de una relación padre -hija perfectamente.

A pesar de ser mediocre, no es de mis peores westerns que he visto. Hay escenas que me han producido el extraño Deja Vu de haberlas visto antes 100 veces, pero para mí es problema no es la falta de originalidad, sino el narrador.

El arte del cine es contar una historia a través de imagen y diálogo. Un narrador que no aporte nada y que sólo te cuente lo que ya ves con tus ojos es ridículo. Parece que te toman por tonto. Por suerte no aparece demasiado.

En la película se muestran diferentes personalidades dentro del ejército, y a pesar de lo que dice el muchacho en un momento ("¡Que bien sienta estar del lado de los buenos!"), yo no encuentro a ninguna mala per se.

En cierto momento aparecen unos primeros planos algo sangrientos que me ha recordado al spaghetti western, pero lamentablemente sólo ha sido una visión fugaz.

En fin, ojalá el gran jefe Cochise haga pedazos a esos yankees cobardes y avariciosos.

Como tantos otros spaghetti western presenta a un grupo de mercenarios contratados por la Revolución Mexicana que se les presenta un dilema moral: quedarse con el oro o ayudar a los revolucionarios.

El grupo en este caso resulta ser muy pintoresco, con un samurái incluido. También está Bud Spencer, el personaje más cómico de la cinta (que por lo general tiene un tono desenfadado).

Como buen eurowestern que es no rehúsa de mostrar violencia explícita, pero falla un poco en algunos aspectos. Hay una escena de unos 5 minutos dónde está sólo el japonés corriendo porque se ha caído del tren. Se sostiene por la fenomenal música de Morricone, pero es algo ridículo.

En resumen, con un guión mediocre, queda en una divertida cinta de acción, estilo Equipo A. Nada nuevo, pero disfrutable.

Una gran decepción. Leyendo críticas de esta película me esperaba encontrar una historia profunda sobre la ciudad de Hiroshima, pero sólo he encontrado poesía barata.

En casi hora y media que dura no pasa absolutamente nada. Sólo dos tortolitos traumatizados por su pasado haciendo poesía romántica.

No me gusta el cine francés y su pretencionismo romántico, no es para mí.