Escribía en una de mis críticas, que era absolutamente hacer nada peor que Brácula. Para mi desgracia (y del cine en general), me equivoqué.

Hot Milk supera con creces a cualquier horror que nunca se haya filmado, y que probablemente se filme jamás. El problema no está en un guión escrito en papel higiénico mientras Don Ricardito cagaba. El problema no está en la actuación; podrían haber contratado a Robert de Niro y Julianne Moore y seguría siendo una infectez.
El problema está en que esto, ha sido perpetrado por un auténtico anormal sin talento, con ínfulas de pseudointelectualismo, y que probablemente se cree inteligente, filosófico y divertido, a partes iguales.

Y ya para rematar, encima esto esta financiado con dinero del erario público. Una auténtica verguenza que el Ministerio de cultura se gastara un solo euro en estas polleces. Luego dicen que el cine español está en crisis y que nadie ve películas españolas. Pero acaso alguien, con tres dedos de frente, pagaría una entrada de cine para soportar semejante basura radioctiva?

Sinceramente recomendaría enviar a Ricardito Bofill al Tribunal Penal de la Haya. Le acusaría de crímenes de lesa humanidad, altra traición e intento frustrado de genocidio a los pobres amantes del cine que hayan aguantado semejante bazofia.

Lo mejor: Que es una escoria tan prescindible que no creo que a Bofill le subvencionen más películas.

Lo peor: Que no se haya hecho una pira con todas las copias existentes de este homicidio cinematográfico.