Creo que este es el primer acercamiento que he hecho nunca al cine de Enrique Urbizu y la verdad es que no me ha podido dejar un mejor sabor de boca. "La caja 507" es un thriller milimétrico, excelentemente escrito y dirigido, con unas actuaciones que hacen avanzar la película sin que puedas despegar la mirada de la pantalla.

En los últimos años se ha popularizado este género dentro del cine patrio, abriendo la puerta a un sin fin de películas de este tipo y conformando un imaginario muy asentado en nuestro país. "La caja 507", por la fecha de su estreno, no puede ser englobada dentro de esta categoría capitalizada por las grandes cadenas televisivas y es quizás uno de sus principales argumentos a favor si la has visto, como yo, en 2021.

Se trata de una película que comparte códigos con el mejor thriller americano, en ocasiones parece una cinta hollywoodiense pero con el presupuesto que manejamos en Europa. Sin embargo, el tema central de la película no puede ser más español: la especulación urbanística. Obviamente al afirmar que comparte códigos con el cine estadounidense no estoy negando su marcado carácter español, pero no estamos aquí para hacer un análisis fílmico en toda regla.

En definitiva se trata de una película muy disfrutable y entretenida, perfecta para aquellos días en los que te apetece ver algo de calidad sin esforzar la mente demasiado. Es un viaje por el lado más oscuro de la sociedad española de principios de siglo, aquella en la que todo parecía que iba sobre ruedas pero sobre las que se estaba cimentando la ruina que llevamos soportando desde hace más de una década. Una terrible premonición.