Un remake flojo donde los haya.
Esta entretenida (por momentos), como un producto comercial del género de terror adolescente. Pero desde que la cinta empieza, hasta que termina se echa de menos el carisma y sex-apeal de Robert Englund, ya que Freddy ha sido, es y siempre será él.
La película cuenta de forma un poco mas oscura lo que ya contó la primera, y sin el humor negro que la caracterizaba.
Aquí Elm Street (o la calle del Olmo), pasa totalmente desapercibida, queda como un elemento secundario de un guión falto de originalidad, que intenta darle en algunos momentos a la cinta un suspense del tipo de Silent Hill. En algunos momentos no se si estaba viendo Pesadilla en Elm Street o un capitulo de Caso Abierto.
Nada, en definitiva, Hollywood se quedó sin ideas e intentan rememorar viejos tiempos de una manera totalmente equivocada, sin llegar a conseguirlo.
Casi prefiero Freddy vs. Jason, por lo menos no quitaban la esencia de Freddy.
4/10