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España España · Alicante
Voto de Titacho:
3
Drama Frida (Laia Artigas), una niña de seis años, afronta el primer verano de su vida con su nueva familia adoptiva tras la muerte de su madre. Lejos de su entorno cercano, en pleno campo, la niña deberá adaptarse a su nueva vida. (FILMAFFINITY)

Seleccionada por España para los Oscar 2018.
21 de marzo de 2018
34 de 48 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ooooooooooooooootra nueva muestra de película española del género “Yo enciendo la cámara y ya si eso que los actores vayan pasando por delante y digan lo primero que se les ocurra (si es que se les ocurre algo, que si no tampoco pasa nada), que luego yo ya diré que me curré un montón el guión, la gente se lo creerá, me llamarán genio, mi productor untará a los críticos, mi distribuidor me moverá por festivales, me lloverán los premios y los aplausos y al que se le ocurra decir la verdad (o sea, que esta película no vale un pimiento), le acusaremos de paleto y de no tener NI PUTA IDEA de cine”. Sí, lamentablemente tenemos otros ejemplos recientes pero no pienso citarlos, que me vengo arriba y empiezo a criticar otras pelis (que de todas formas todavía tenían algo de chicha pero es que esta…).

El guión y el propósito es claro: los padres de la directora murieron de SIDA cuando ella era pequeña (perdón por el spoiler pero lo anuncian a bombo y platillo en la promoción de la película), la película cuenta los meses posteriores así que automáticamente y sin aportar NADA MÁS nos tiene que dar mucha pena y parecernos una obra maestra.

Viéndola me viene a la memoria un truño de principios de los 90 (Elegir un amor, de Joel Schumacher), un pastelón en el que Julia Roberts era enfermera y cuidaba a Campbell Scott, enfermo de leucemia con la musiquita IN-SO-POR-TA-BLE de Kenny G de fondo. En aquellos lejanos tiempos cuando yo decía que aquello era un bodrio absoluto las chicas (sin ser sexista, ni machista, ni nada de eso, pero es que las que lloraban y veían un peliculón en aquel subproducto eran siempre mujeres), se me echaban encima en plan “insensible, que el chico tiene cáncer”, y yo me quedaba a cuadros: ¿entonces basta con contar algo melodramático y lacrimógeno para que una película sea buena? Con mi respeto más absoluto a tod@s l@s enferm@s de cáncer ¿es suficiente con que cuentes una historia con una enfermedad espantosa, un chico (guapo, claro), que la sufre y una enfermera (guapa, evidentemente), que lo cuida para que eso sea un peliculón aunque todo lo demás no tenga ni pies ni cabeza? Pues con “Verano 1993” pasa lo mismo (y nuevamente mi respeto a quienes padecen el SIDA), no basta con que me cuentes que una niña ha perdido a sus padres, y encima a causa de una enfermedad que la estigmatiza socialmente, para que me la historia te conmueva y la película te parezca una maravilla tendrás que contar algo más. Vamos, digo yo.

NO se puede hacer una película sin guión (porque a mí que no me digan que eso es un guión), NO se puede pretender que la historia te llegue al alma si está vacía y NO se puede querer que la frescura absoluta de las niñas delante de la cámara (que la hay, eso es innegable, al igual que la ambientación en los 90 y las entrañables pinceladas de la cultura catalana), sea una excusa para no contar nada más durante una hora y media. Porque al final “Verano 1993” no es más que eso: niñas jugando delante de la cámara.

Asisto atónito, con los ojos como platos, los pelos como escarpias, con estupor absoluto y el ánimo encogido al aluvión de premios que ha recibido esta….cosa…, incluso alguien en la academia española de cine llegó a pensar que esta era una buena candidata para representar a nuestro cine en los Óscar (como si nuestro cine no tuviera ya bastantes problemas, pobrecico mío…). De verdad que me hubiera gustado ver la cara de los académicos de Hollywood cuando les proyectaron la película, ahí todos mirándose unos a otros y preguntándose “¿Pero aquí cuándo va a pasar algo?”

Veremos qué hace Carla Simón con su segunda película ahora que ya es oficialmente la gran promesa de nuestro cine, pero algo me dice que seguirá entregándonos películas vacías como esta…y que seguirá a sus pies toda la industria del cine.
Titacho
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