Esta película me la recomendó un amigo, y actualmente es mi enemigo. Soy un valiente por haber sobrevivido a la tentación de apagar la televisión, o romperla con un hacha: soltando toda la frustración acumulada durante todo el film.
Después de veinte años , hoy he visto por primera vez esta gran obra maestra y quiero decir que ha envejecido como un vino malo y picado desde finales de los noventa.
Esta película es como atiborrarse de polvorones y mantecados, sin agua en plena ola de calor, insufrible.
Narra la historia de una familia (grupo de colegas) atípica y quebrada por la separación de los padres, y la rebeldía de un niñato que coquetea con las drogas.