La película aporta poca cosa con respecto a las últimas de Allen. Definitivamente prefiero esta a Vicky Cristina Barcelona, porque al menos sí me parece entretenida. Si te gusta Allen esta película te tiene que gustar, se parece demasiado a los últimos trabajos de Allen, donde ejerce un poco de maestro con la consabida moraleja de que lo que merece la pena simpre está ahí cerca y sólo hay que saber buscarlo. Para ello se vale de Larry david, que podríamos catalogar como casi un clon (no en el físico, si en el intelecto) del Allen de los últimos tiempos, aunque aún más exagerado: maleducado, irrespetuoso, prepotente, provocador. A mi, que me gusta este director, no se me hizo en ningun momento pesada la película, por más que, efectivamente, sea muy repetitivo y cuente lo mismo de siempre. Aporta poco, pero entretiene con diálogos allenianos, que por malos que sean suelen ser de lo mejor siempre en cuanto a guiones en el cine comercial actual. Yo he pasado un rato agradable, previsible, pero entretenida. Aconsejable