Una vez más, Hollywood vuelve a demostrar que, cuando se ponen las pilas, no hay quien les gane haciendo series. Y seguro que Héroes se convertirá en un clásico de la pequeña pantalla y en una importante referencia para nuevas generaciones de guionistas.

Si algo demuestra esta magnífica serie es que se puede hacer algo nuevo e innovador aun cogiendo como base ideas ya usadas con anterioridad (sí, estoy pensando en X-MEN). Pero a pesar de tener destellos que nos recuerdan inevitablemente al cómic de la Marvel, Héroes crea una historia original y nunca vista antes en el cine. Todos y cada uno de los personajes hacen que lleguemos a sentir por ellos tanto compasión como odio, ya que sus perfiles se alejan bastante del maniqueísmo habitual en estas producciones. Con ello podemos disfrutar de unos héroes más humanos y más cercanos a nosotros. Y esta, realmente, ha sido una de las grandes claves del éxito de la serie, ya que han conseguido que el público se identifique, de una u otra forma, con los protagonistas y sus poderes (seguro que más de uno hemos cerrado los ojos imaginando que nos teletransportábamos, ¿verdad?).

En definitiva, todo un lujo de serie y un gran disfrute para los sentidos. Muy recomendable para cualquier tipo de público, sean cuales sean sus gustos. Esperemos que la segunda temporada no defraude (seguro que no lo hará). Y quién sabe, quizás yo también me apunte a lo de salvar a la animadora... porque menuda animadora!!!