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España España · Córdoba
Voto de Nati Serena:
10
Serie de TV. Romance. Drama Miniserie de TV. Cuenta la superación de una ruptura en diez episodios de escasos minutos, en donde una chica intenta olvidar un amor del pasado. Lina está empezando de nuevo, se muda de casa, busca un nuevo trabajo y prueba nuevas experiencias. Pero lo que Lina intenta hacer en realidad es olvidar un amor del pasado, su primer amor. Cada día, Lina intenta que el tiempo que pasa pensando en Nico sea un minuto menos, para así poder avanzar con su vida. [+]
21 de enero de 2022
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Netflix está apostando últimamente por los formatos cortos, obras cuyo fin es el visionado rápido, haciendo que en el frenesí de la actual sociedad consuma un producto tras otro sin apenas dejarnos tiempo a la reflexión con la automatización de “ver episodio siguiente”. Pasamos de una película a otra, de un capítulo a otro, de una serie a otra, olvidando lo que acabamos de ver y no viviendo la obra, no dejando que nos impregne al completo. Sin embargo, visionar el primer episodio de «El tiempo que te doy» y disfrutar de cada uno de sus escasos minutos, de sus pequeños detalles, te hará sentir cuando la termines el mismo vacío, tan difícil de llenar que siente Lina, la protagonista de la obra.

Así es como podemos ver que ambos viven el deterioro de la relación desde ángulos diferentes pese a que el punto de vista de la narración siempre esté centrada en Nadia, ya que cada episodio nos va ofreciendo nuevos detalles que también nos muestran el comportamiento de Nico, no solo viendo los recuerdos bonitos de la relación, sino los malos, lo que nos hace ver como poco a poco se ha ido dañando la relación, llegando a entender el porqué de su ruptura. Le vemos abrazarse, apoyarse, reír juntos, hablar del tiempo que les quedan y mirarse con amor y deseo mientras follan desde la retrospectiva optimista (o recuerdo rosa) de Lina pero también las discusiones y cómo se van haciendo daño el uno al otro, hasta acabar en ese último polvo lleno de dolor.

Pero «El tiempo que te doy» no solo nos habla de los procesos de duelo como hemos señalado, sino que también hace cierta radiografía de la sociedad actual al hablarnos desde un primer momento de cómo estos dos jóvenes deben afrontar trabajos inestables y mal pagados mientras tratan de ahorrar para seguir estudiando como Lina o mientras no encuentran trabajo relacionado con sus carreras como Nico. Además, Lina al trabajar de camarera de noche en el hotel de un pueblo donde, nadie es de allí en verano, nos hace ver el ritmo absorbente del turismo.



La ocularización del relato en los ojos de Nadia se va a ir acortando cada vez más, pudiendo comprobar conforme avanza la narración planos más cercanos, planos que nos van a transportar mediante su mirada a sentimientos como la negación, la tristeza, la ira y la aceptación. Ella echa de menos a Nico y no sabe si hizo todo lo que estuvo en sus manos por sostener la relación ya que lo fue alejando poco a poco porque le hacía sentir triste y sola cuando él no avanzaba tras la muerte de su padre. Nos encontramos una vez tras otra con recuerdos proyectados por Lina pero en ningún momento con cierta repetición, sino que se trata de un relato singulativo. De igual manera la focalización interna fija que en ciertos puntos pasa por una ocularización interna secundaria cuando no solo vemos el dolor en el rostro de Nadia, sino el hecho que le hace sentirlo, tal y como ocurre tras el accidente en moto de Nico cuando esta se entera que estuvo con otra chica.

Una historia de amor y desamor construida a base de recuerdos que se aleja de lo tradicional y nos enseña la sensibilidad y voz propia de los creadores. Haciendo una comparación con la teoría de Susan Sontag sobre la fotografía, estamos hechos de recuerdos memento mori, de huellas de gente que ha ido pasando por nosotros, de pequeños instantes que guardamos en nuestra memoria como correr detrás de un tren que estamos a punto de perder o recordar como nuestra madre nos canturreaba de pequeños sabiendo lo que lo odiábamos y de otros muchos que olvidamos o guardamos en nuestro subconsciente y en eso creo que también consiste amar, en “participar en la mortalidad, vulnerabilidad, y mutabilidad de otra persona”. La imagen, al igual que el recuerdo, presenta lo perdido, lo olvidado, “testimonio de la fusión implacable del tiempo”.


Enlace blog: https://paradigmamedia.org/el-tiempo-que-te-doy-lo-mismo-de-luz-que-de-oscuridad/
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Nati Serena
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