Hace unos años (no demasiados) Disney y en especial su filial Pixar copaban todo el segmento del cine de animación haciendo que cada uno de sus estrenos se convirtiera en todo un acontecimiento sin tener mucha competencia a su alrededor por lo menos que pudiera hacerle sombra, esto con el paso de los años ha cambiado y muchas otras compañías han surgido llegando a hacerle la competencia a la todopoderosa Disney e incluso en algunos casos a superarla. Algunas de ellas son Dreamworks Animation, Laika (experta en el stop-motion) y esta Illumination Entertainment (entre otras) que sorprendió con “Gru: Mi villano favorito” se asentó con el spin-off de los “Minions” y este año dio un golpe de efecto con “Mascotas” que ha funcionado sorprendentemente bien tanto de crítica como de público, ahora nos trae “¡Canta!” una película donde la música tiene mucha importancia.

Y es la música el núcleo central de la película, la inunda y la envuelve por completo como nunca antes se había visto en un film, es la película con más temas musicales de diferentes estilos y épocas que se ha visto jamás, tanto como parte del argumento como de fondo, ya solo este detalle sirve como aliciente para verla a todo amante de la música de cualquier estilo. Aparte de esto los temas están interpretados por personajes animales que le pegan muy bien tanto por su aspecto como por actitud.

Otro punto fuerte de la película es su argumento que juega con ventaja ya que intercala muchas historias muy diferentes entre sí haciendo imposible que alguna de ellas no te interese o te sientas reflejado, tantas que incluso en un momento dado de la película pensé que sería muy difícil terminar todo este conjunto de historias tan heterogéneas de una manera aceptable, me equivoque y el final resulta bastante efectivo y emotivo. Pero claro esta cantidad de historias tiene un efecto secundario y es que el metraje se alarga un poco haciendo que dure algo más de lo que viene siendo habitual en este tipo de películas muy dirigida sobre todo a los más pequeños.

La animación no es su punto fuerte y mucho menos comparándola con otras de hace muy pocas semanas como “Vaiana” pero claramente esta película no quiere conquistarte por los ojos sino más bien por los oídos haciéndote mover los pies irremediablemente y divirtiéndote con unas historias muy divertidas y emotivas.

Illumination lo consigue por partida doble en un año (algo muy difícil de hacer) y se gana el respeto de todos los que nos gusta el cine de animación, una propuesta ideal para estas fechas, para los más pequeños y sus padres y para todos aquellos a los que les apasiona la música.

Lo mejor: La cantidad y variedad de música que tiene. El argumento nos cuenta muchas historias imposible que alguna no nos interese.

Lo peor: La animación no es de lo mejor que se ha visto y se hace un poco larga.