La idea original es muy buena: una mujer se decide a enfrentar el mundo en Sao Paulo reivindicando el poder del sexo, la prostitución, la belleza y el marketing. Junto a ella dos bellas amigas que también están decididas a hacerse recordar por sus clientes y enfatizar la modernización a la que puede llegar el viejo oficio. Sin embargo, la idea se queda allí, y el desarrollo pasa por ser simplemente atractivo por la belleza sobre todo de Rafaela Mandelli (Karin) y los hermosos desnudos que protagoniza. De resto, las situaciones que pueden tener mayor tensión dramática terminan en simpáticos chistes, o situaciones de comedia de enredo sin mayor profundidad.
Bien por el apoyo de HBO al cine brasilero, bien por sus actores y directores. Todo ello merece una recompensa, aunque los productos aún estén en mora con los espectadores de una canal que nos tiene acostumbrados a mejores cosas por parte de sus directivos norteamericanos.