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Voto de Carla road60b:
8
2015
Melissa Rosenberg (Creadora), Simon Cellan Jones ...
6,8
11.696
Serie de TV. Drama. Ciencia ficción. Acción
Serie de TV (2015-2019). 3 temporadas. 39 episodios. Una mujer con superpoderes decide renegar de ellos e iniciar una vida nueva ejerciendo como detective privada. (FILMAFFINITY)
20 de junio de 2016
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es inevitable encontrar toques de cine negro en Jessica Jones, especialmente en el piloto: protagonista detective, narrado en primera persona, doble moral, alcohol, pasión, asesinatos, oscuridad. Tiene algunos planos que me recuerdan a Breaking Bad (cómo no); planos detalle, imposibles, al revés. En los siguientes capítulos va virando hacia el thriller, pero sin perder la referencia del primero. El desarrollo de la trama está muy bien repartido, cada capítulo te deja con ganas de más y no tiene grandes picos ni valles. Sin embargo, con toda esa intriga tan compleja y ese ritmo tan fluido, lo que tiene más poder de fijación son los personajes.
Jessica es la revitalización femenina que ya venía haciendo falta en el mundo superheroico. Da una patada al topicazo de tetas enormes en trajes minúsculos; y se enfunda en unos vaqueros, camiseta básica y chupa de cuero. Pero dejando de lado la parte más fantástica del asunto, es un personaje poderoso y no porque tenga superfuerza.
Jessica es la revitalización femenina que ya venía haciendo falta en el mundo superheroico. Da una patada al topicazo de tetas enormes en trajes minúsculos; y se enfunda en unos vaqueros, camiseta básica y chupa de cuero. Pero dejando de lado la parte más fantástica del asunto, es un personaje poderoso y no porque tenga superfuerza.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Es una fémina tremendamente compleja, contenida, seria, centrada en su trabajo, con los objetivos claros. Pero no por ello deja de demostrar que tiene sentimientos hacia las personas que le importan; y lo demuestra con hechos, no con palabras ni siendo una llorona. Tiene claras sus prioridades y lo demás es secundario. Ésto es algo que se ve muy bien en las situaciones de tensión que provoca Kilgrave, en las que necesita actuar rápido y priorizar. Siempre antepone salvar la vida del que intenta suicidarse y luego ya se ocupa de él aunque tenga que perseguirlo. Incluso cuando el afectado es Luke, no se ve anulada y lucha con él en un escenón que lo dice todo, lo demuestra todo. No huye, pelea; no es débil y no se lo permite en ningún momento, ni con las costillas rotas. No porque sea una heroína, sino porque tiene carácter.
Incluso Trish, que al principio aparece presentada como la Barbie tonta; acaba demostrando ser una Barbie más bien combativa. No se corta al enfrentarse a Kilgrave en el programa de radio y se prepara con inteligencia a base de entrenos de Krav Maga y una casa-fortaleza. Pero es que volviendo al tema maromil deja claras las jerarquías con una sencilla frase “Hey, last night was fun but that doesn’t mean I want your opinion”. Es de esperar que el único I Love You se lo digan entre ellas porque merece la pena fomentar el valor de amistad-fortaleza y no el de amor-debilidad.
Ante semejantes mujeres la figura falsamente empoderada del hombre queda en ridículo. A pesar de que Kilgrave tiene una historia muy dolorosa detrás y dice amar a Jessica, su único afán es el control. Del mismo modo que Will Simpson está encasillado en el papelón de patriota heroico que va a salvar a su chica y, si le dejan, al mundo. Frente a féminas complejas, hombres simples. Eso sí, a David Tennant le hay que elogiar una actuación de psicópata que me recordó a su papel de Barty Crouch en Harry Potter y el Cáliz de Fuego. Solo le faltaba sacar la lengua.
El tema de las familias está tocado con pinceladas y de un modo muy eficaz: Trish con su madre (padre inexistente), Jessica y su familia perdida en el accidente, Kilgrave y sus padres (que lo quisieron salvar y acabaron viviendo atemorizados por él). Lo vemos hasta con personajes secundarios: Hope y sus padres o los hermanos mellizos del piso de arriba. Es decir, trata muy bien las relaciones sin caer en el lado empalagoso.
Es una serie oscura que trata a la superheroína como lo que es, una detective. Punto. Y hay sangre, mucha sangre. Hay más sangre que en todas las películas de Vengadores, X-Men y Superman juntas.
Incluso Trish, que al principio aparece presentada como la Barbie tonta; acaba demostrando ser una Barbie más bien combativa. No se corta al enfrentarse a Kilgrave en el programa de radio y se prepara con inteligencia a base de entrenos de Krav Maga y una casa-fortaleza. Pero es que volviendo al tema maromil deja claras las jerarquías con una sencilla frase “Hey, last night was fun but that doesn’t mean I want your opinion”. Es de esperar que el único I Love You se lo digan entre ellas porque merece la pena fomentar el valor de amistad-fortaleza y no el de amor-debilidad.
Ante semejantes mujeres la figura falsamente empoderada del hombre queda en ridículo. A pesar de que Kilgrave tiene una historia muy dolorosa detrás y dice amar a Jessica, su único afán es el control. Del mismo modo que Will Simpson está encasillado en el papelón de patriota heroico que va a salvar a su chica y, si le dejan, al mundo. Frente a féminas complejas, hombres simples. Eso sí, a David Tennant le hay que elogiar una actuación de psicópata que me recordó a su papel de Barty Crouch en Harry Potter y el Cáliz de Fuego. Solo le faltaba sacar la lengua.
El tema de las familias está tocado con pinceladas y de un modo muy eficaz: Trish con su madre (padre inexistente), Jessica y su familia perdida en el accidente, Kilgrave y sus padres (que lo quisieron salvar y acabaron viviendo atemorizados por él). Lo vemos hasta con personajes secundarios: Hope y sus padres o los hermanos mellizos del piso de arriba. Es decir, trata muy bien las relaciones sin caer en el lado empalagoso.
Es una serie oscura que trata a la superheroína como lo que es, una detective. Punto. Y hay sangre, mucha sangre. Hay más sangre que en todas las películas de Vengadores, X-Men y Superman juntas.