Creo que estoy totalmente acertado al decir que El Resplandor es una de esas películas "impresicindibles" que uno debe de ver una vez en la vida, y no solamente una vez. Como mínimo, debes verla tres veces, y si son seguidas, muchísimo mejor.
¿Por qué digo esto? Pues porque cuando terminé de verla la primera vez, me pareció una auténtica basura (y no solo por el doblaje, ojo).
Sin embargo, al visionarla por segunda vez (más que nada para volver a partirme de risa con la cara de Shelley Duvall) y ver con más atención los detalles, me dejó bastante satisfecho. Y el otro día la volví a ver con un amigo.

¿Os podéis creer que cuando aparecieron los créditos finales mi amigo estaba en medio de un ataque de risa y yo estaba literalmente MUERTO DE MIEDO? YO, que era la tercera vez que la veía, me encontraba hecho un ovillo con la manta, mientras mi colega soltaba frases del tipo de: "¡Venga! ¿En serio te asusta una bazofia así?"

Cuando regresé a mi casa, me puse a pensar en por qué me había afectado de tal manera la película, siendo ya un "experto" en dicho metraje. Y entonces me di cuenta: El Resplandor es una de esas películas que hay que ver al saber previamente lo que vas a ver. Sé que muchos de vosotros no lo entenderéis, pero es mi opinión.

Estamos acostumbrados a que en una película de terror se nos cuenta paso a paso de que va la historia, y eso no sucede en El Resplandor.
Aquí, Stanley Kubrick (director que nunca me acabó de gustar) se dedica a sugerir. Y de qué forma...

La escena del ascensor, las dos gemelas cogidas de la mano, Jack Nicholson...
Absolutamente magnífico.

No obstante, sigo pensando (no me preguntéis por qué, no lo sé) que es una película que hay que visionar OBLIGATORIAMENTE más de una vez.