Reunión de los "guionistas" de Aniquilación:

- Bueno, ¿alguna idea más?
- Pon un tigre que cague arco iris, que eso mola mucho...
- ¡Sí, sí, sí! Un tigre cagando arco iris es una idea cojonuda
- Mmmm. Lo siento chicos, pero eso ya sale en Tito Yayo...
- Jo, que pena, con lo que molaría...
- Bueno, pero no os preocupéis, vamos a poner a un oso mutante ventrílocuo
- ¡¡¡Bieeennnn!!!
- Bueno, que siga rulando el peta que hay que acabar el guión para mañana

Algo pasa en la ciencia-ficción cuando estas estupideces se nos presentan como obras maestras. Cuando desbarrar se considera genialidad. Cuando rodar lo primero que se te pasa por la cabeza es alabado por la crítica como "una propuesta diferente, original e inteligente"

Aniquilación es un monumento a lo absurdo, a la carencia de guión, a ir encadenando imágenes oníricas, chocantes o desagradables sin razón ni sentido. Y lo han recibido como una obra maestra del género. Tal vez por eso la ci-fi está como está.

Está bastante extendida esa idea de que lo que no se entiende es porque es profundo, inteligente y admirable. Como en el cuento del traje nuevo del emperador, nadie se atreve a decir la verdad. Que esto podía haber sido una historia inteligente, una propuesta original y provocadora. Y se queda en una mezcla de peli de terror y de las peores pesadillas de un Stephen King de baratillo.

Si alguien se anima, le propongo rodar otra obra maestra que se llamará, digamos, "Respuesta". En ella, aparece en medio del campo un objeto enorme con forma de cipote. Todos los que lo tocan se transforman en zarigüeyas que hablan en húngaro y recitan a Baudeliere. Por allí se deja caer el/la protagonista, que está todo el rato poniendo cara de compungido/a, como si llevase una semana sin ir al water. De camino al cipote se encuentra unas cabinas que al meterles un euro se transforman en unos señores con bombín que van en bicicleta. Tras una serie de peripecias absurdas, nuestro protagonista entra en el cipote por un glande grande. Dentro se le aparece Cifuentes, que le entrega un Master del Universo y un bocadillo de panceta. Al salir, nuestro héroe/heroína descubre que el master se ha transformado en una bandada de pajarillos. Y se queda mirando el cielo con cara de profundo hasta que llega un general en un triciclo de pedales y le pregunta "¿Qué ha sido eso?" y nuestro prota acentúa aún más la cara de estreñido y sin dejar de mirar al cielo (que será de color añil/verde kiwi) le responderá:

- Fue la respuesta.

Y después los créditos y a recoger alabanzas y loas.

Aniquilación es más o menos eso, pero más pretenciosa, pedante y pagada de si misma. Y según todos, es una obra maestra. En realidad es como Amanece que no es poco, pero sin gracia ninguna.

P.D. En "Respuesta" si queréis metemos el tigre que caga arco iris, que estas obras maestras no se paran ante nada.