Origina, cierto es, pero a costa de qué. Esa es la cuestión. ¿Hace disfrutar? No en mi caso. Por tanto, pido disculpas a los amantes de esta producción, que sé que los hay, pero mi impresión no puede ser de aprobado. Por el fin propio de una obra de arte: hacer disfrutar.

Valoro altamente la originalidad, y por ello le doy dos puntos. Un punto más por la confección tan compleja de la trama. Y otro más, haciendo una suma total de cuatro, por los efectos especiales maravillosos, incrementando, supongo, el coste de la producción.

Hace seis años vi la película en el cine, y me dormí. Hoy la he visto en casa, tras pararla varias veces. La he disfrutado más que hace más de un lustro, y hasta creo haberla entendido, pero no la he disfrutado.