Cuando vi el título de esta película no pude evitar pensar en Druídas, el Rey Arturo o La Última legión. Además, al ver a Olga Kurylenko en el reparto se me vino a la cabeza Keira Knightley. Y aún así decidí verla.

Con tan pocas esperanzas me dispuse a llenar mi larga lista de películas que nunca debería haber visto. Sin embargo Centurión ha superado el listón del 5, buena ambientación, atrezzo -salvo alguna tienda de campaña recién salida de la lavadora -, demasiada sangre.

Una película cuasi-bélica sin muchas pretensiones y que aprovecha bien su hora y media, sin detenerse en rebuscadas escenas a lo Misión Imposible ni llena el tiempo de diálogos innecesarios ni afán de protagonismo - me viene a la cabeza El Guerrero nº 13.

En resumen: humilde y entretenida. Sin duda un acierto.

Especial mención merecen las cabezas cortadas y los chorros de sangre, por fin espadas que cortan y gente que sangra.