La ficha de la serie especifica: "Serie de TV. Drama. Thriller. Acción". Para mí que de las cuatro categorías, la mitad al menos es discutible.

El primer capítulo es como un peluquín, como el político de turno. Insincero. Es la representación de lo que podría haber sido pero no va a ser, ofrece lo que en realidad no se va dar, promete y no cumple.

Lo que en un principio es acción se convierte después en una serie de diálogos que a una persona que sea medianamente versada en el visionado de series le parecerán repetidos, reciclados, sin el sabor esperado, como ese café que se ha quedado frío y que bien o se recalienta y ya no sabe a café o se toma frío sabiendo que no es lo mismo y que sí, que se puede beber, pero no sacia.

Hay quien dice que se puede ver por los actores principales, que sacan el barco a flote. Yo pienso que aquí no hay barco que reflotar, esto es un trozo de madera, de madera seca y que no arde porque no hay ni siquiera un pequeña chispa que lo haga posible.