Hacía tiempo que quería ver ésta película de culto y por fin llego el día, sólo me arrepiento de no haberlo hecho antes. Son de esas películas que sabes que son buenas pero las vas dejando, las vas dejando y después de verlas dices ¡joder! lo que me estaba perdiendo.
Me ha recordado los grandes momentos que viví con otra película de culto como es “El Jovencito Frankenstein” y que me reí de lo lindo. Y en ésta Rocky Horror me ha ocurrido lo mismo, es desternillante, el ver a Tim Curry de travestido y con taconazos a lo Drag Queen es impagable.
Ya nada más empezar te ponen las pilas con el tema tan conocido y versioneado infinitas veces en tantas películas y series, como es “Time warp”. Una coreografía genial, con personajes dantescos y que perdurará en la memoria del espectador para siempre y con la que te harán partirte el espinazo a reír.
Luego hay otros temazos de canciones como “Hot Patootie” interpretado por el heavy Meat Loaf que te hace menear el esqueleto como un poseso.
En realidad una vez visionada la película nos damos cuenta que es una estrambótica versión de el monstruo de Frankenstein, que hace tener una ligera afinidad con la ya nombrada “El Jovencito Frankenstein”.
En su comienzo tenemos a la pareja de novios Brad y Janet que conduciendo bajo la lluvia sufren un reventón de neumático y se ven en la necesidad de guarecerse en un tenebroso castillo, en el cuál les dará la bienvenida el primer personaje hilarante, Riff Raff, una versión estrafalaria de Igor.
A partir de aquí veremos una versión muy particular y pintoresca del monstruo de Frankenstein en un espectáculo de cabaret con tintes transexuales para celebrar la Convención anual Transilvana.
Asistiremos a todo un espectáculo de coreografías musicales a cual más desternillante y bañado por escenas de relaciones amorosas de unos personajes con otros con los tintes de travestismo ya mencionados.
Lo que no me explico es como después de ésta película pudo hacer Tim Curry un personaje tan antagónico como el de Pennywise, pero en fin aquí es donde se demuestra el buen hacer de un actor.
Para terminar mi consejo es que nadie se espere y tarde tanto tiempo como yo en ver ésta obra maestra de la comedia. Y como no, mi nota es de un pedazo de 8 ¡je,je!.