Rambo (Acorralado) de Ted Kotcheff, es una cinta de acción indispensable en el género. Dirigida con un ritmo ligero y con un estilo intrépido por la acción que cubre todo el film, es una obra impetuosa como pocas al marcar un antes y un después en este tipo de cine y que además dio pie a varias secuelas de menor valor, complementando una saga que inmortalizo aún más a Stallone. Realizada de un modo arrollador, tiene un resultado soberbio que cautiva a los amantes de películas repletas de acción y violencia.
La fotografía es impactante al mostrar escenas espectaculares que emocionan a los amantes del género, desconcertando además con sombrías y sugerentes imágenes. La música es estimulante gracias a una banda sonora alentadora como pocas, que fascina e inquieta en los momentos oportunos. Los planos y movimientos de cámara, están elaborados para dar dramatismo y velocidad al film con los travellings, panorámicos, reconocimiento, seguimiento, cámara en mano, avanti y tercera persona muy apropiados para este tipo de cine.
Las actuaciones son pertinentes. Con Sylvester Stallone como principal en un papel impetuoso y contundente y certeros acompañamientos de Richard Crenna, Brian Dennehy, David Caruso, Jack Starrett, Michael Talbott y Chris Mulkey. Empleando para estos unos vestuarios y caracterizaciones alusivos y bien trabajados en detalles según el personaje, en una buena dirección artística. Destacando además, unos efectos escalofriantes al mostrar la sangre y la violencia sin tapujos.
El guion escrito por Sylvester Stallone, Michael Kozoll y William Sackheim y basado en la novela de David Morrell es impetuoso, al tener una historia apasionante con la acción por bandera y la lucha encarnizada que produce el orgullo herido, siendo por tanto un trabajo simple pero muy efectivo. Llevado a cabo con una narrativa insidiosa y escasa, pero que es muy expresiva en los momentos oportunos, dejando alguna parrafada mítica en la historia del cine y en especial del protagonista.
Para finalizar, la considero otra de las obras indelebles y esenciales en el género de acción de los años 80. La cual marcó un antes y un después en el género y lanzó aún más al estrellato a Sylvester Stallone. Recomendable por su dirección, fotografía, música, efectos, movimientos de cámara, vestuarios y caracterizaciones que convierten a Rambo Acorralado, en un film de visión obligada para los amantes del más puro cine de acción, basado en tipos duros sin mucha conversación pero con muchas ganas de destrozarlo todo.