Haz click aquí para copiar la URL
Chile Chile · www.elotrocine.cl
Voto de Wladimyr Valdivia:
9
Comedia. Drama Después de hacerse famoso interpretando en el cine a un célebre superhéroe, la estrella Riggan Thomson (Michael Keaton) trata de darle un nuevo rumbo a su vida, luchando contra su ego, recuperando a su familia y preparándose para el estreno de una obra teatral en Broadway que le reafirme en su prestigio profesional como actor. (FILMAFFINITY)
20 de enero de 2015
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Con nueve nominaciones a los próximos Premios Oscar –incluyendo el de Mejor Película y Mejor Director- y con más de 90 premios a su haber, “Birdman” es la última película del mexicano Alejandro González Iñárritu (“Amores Perros”, “21 Gramos”), que vuelve a filmar un largometraje tras cuatro años desde “Biutiful” (2010). Y lo hace en grande.

“Birdman” es la historia de Riggan (Michael Keaton), un actor de teatro que intenta regresar a la cima del espectáculo tras un exitoso pasado en el cine interpretando a Birdman, un superhéroe. Hoy, a la cabeza de una compañía, lucha con sacar su obra estrella adelante, nada menos que en Broadway, sobrellevando una complicada historia familiar.

El tema de Iñárritu siempre ha sido el drama personal de su(s) protagonista(s) y navegar en lo más profundo del alma, la mente y el corazón. La cinta nos lleva a la trastienda de una –algo desprolija- compañía de teatro y nos hace partícipes de todos sus movimientos. Toda la cinta es un ajetreado período al interior del mundo de las tablas. Birdman, el personaje que interpretara Riggan años atrás, convive con él en su cabeza, es su alter ego y, como tal, representa todo lo que Riggan no quiere hacer pero sabe que debe hacer, y es su fantasma que le recuerda todo el tiempo su realidad. Con todo en contra, hace lo imposible por sacar adelante su obra y ganarse a la crítica, factor fundamental para recuperar su prestigio y reencontrase con su ego. Sam (Emma Stone), su hija, no puede alejarse de las drogas; la lucha constante con Mike (Edward Norton), un actor de reemplazo intratable, y la constante presión que significa recuperar su status, conforman una historia original, atrevida y furiosa, de múltiples lecturas.

En el mundo de “Birdman”, la ficción se codea con la realidad. La cinta transcurre a través de un eterno y falso plano secuencia de 120 minutos, donde las transiciones corren por nuestra cuenta; donde la banda sonora se reduce a solos de batería interpretados en el mismo universo de Riggan y los personajes de la película; y donde es imposible no ver sobre las tablas del escenario en donde Riggan se enfrenta con su público, al propio Michael Keaton, quien, al igual que su personaje, regresa a la pantalla grande, otorgándole a la cinta un grado de credibilidad insuperable.

Reconocido el talento de González Iñárritu como director, es en “Birdman” donde alcanza su máximo esplendor como guionista, orquestando una sinfonía de ritmo frenético, con un relato detallado en fantasía y un sinnúmero de elementos técnicos en la narrativa, siendo fundamental las mágicas transiciones del paso del tiempo a modo de elipsis, que en un ejercicio similar a lo realizado por Richard Linklater en “Boyhood”, consigue dar explicación a lo que vemos al minuto siguiente, dándonos trama y contexto, sin la necesidad de habernos explicado nada, entendido como una estructura narrativa continua, en este caso perfecta, con imponentes saltos de tiempo.

Las interpretaciones de Edward Norton (“American History X”, “Fight Club”), Emma Stone (“The Help”, “The Amazing Spider-Man”) y Naomi Watts (“21 Grams”, “Lo Imposible”) deslumbran. Sus nominaciones no han sido en vano y, esta vez, sí podemos estar de acuerdo con la crítica norteamericana, pero sin duda es Michael Keaton, quien carga con el peso cómico dramático de la cinta, el dueño del teatro, quien homenajea al cine y a sí mismo, regalándonos el mejor papel de su carrera, como un tipo con el ego destrozado por los años, las críticas, el paso del tiempo y la carencia de triunfos profesionales; que sufre de alucinaciones y es incapaz de manejar su vida, con la que se enfrenta cara a cara en su última oportunidad.

Un ejercicio sobre la fama y cierta realidad detrás del actor y su trabajo, una crítica hacia la crítica, un escaneo a la fragilidad y una cachetada al mundo del cine, donde todo parece hecho. Birdman. Verdades y sus consecuencias.


---
www.elotrocine.cl
Wladimyr Valdivia
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow