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Voto de Ferdydurke:
3
25 de mayo de 2023
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tan magnífica en la primera parte como absolutamente desastrosa la segunda, especialmente el tramo final, de traca, de sanción disciplinaria y querella criminal (y quizás a ser posible en España, sal en la herida, nadie se salva).
Lo que al principio son buenos diálogos acerados, reflexiones existenciales entretenidas escépticas cachondas, personajes bien trazados delineados depauperados, aventuras, elipsis, inteligencia, humor, hecatombe, barbarie y, en definitiva, en el fracaso más absoluto hermosura, después se trivializa y encochina y enreda para acabar encajonando(se) la historia dentro de un esquema amoroso la mar de cochambroso (ni nada creíble por otra o la misma parte esas pasiones así como de repente, sobre todo ella que pierda los vientos y el sentío por un viejo pellejo arruinado y sin el más mínimo encanto ni salero ni gracia ni nada, duermeabuelas).
Lo que al principio son buenos diálogos acerados, reflexiones existenciales entretenidas escépticas cachondas, personajes bien trazados delineados depauperados, aventuras, elipsis, inteligencia, humor, hecatombe, barbarie y, en definitiva, en el fracaso más absoluto hermosura, después se trivializa y encochina y enreda para acabar encajonando(se) la historia dentro de un esquema amoroso la mar de cochambroso (ni nada creíble por otra o la misma parte esas pasiones así como de repente, sobre todo ella que pierda los vientos y el sentío por un viejo pellejo arruinado y sin el más mínimo encanto ni salero ni gracia ni nada, duermeabuelas).
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Y la utilización de los bandidos (aquí hacen la labor o el papel, al masivo muere, de los citados y abundantes indios de Montana, de todas las clases) mexicanos (maldita sea tu raza exclama o les suelta ella, que pertenece, supuestamente, eso parece que dice, enrabietada, a la misma que justo desprecia) como parodia tópica caricaturesca grotesco ofensiva, solo hay que ver, en ese sentido, a ese gerifalte tan penoso, esos primeros planos de vergüenza, arremeter como un descerebrado miserable cabestro contra/a por la hembra.
Digámoslo así o ya, lo antes posible para que menos duela, es ella la que arruina la función o faena, esa sentimental deriva de la historia absurda, previo paso por el consabido, tópico hasta el delirio, intento de violación sin descanso, continuo (lo hemos visto millones de veces eso; grupo de hombres solitarios en la escapada o el trabajo que duermen al raso en película del oeste, mujer la mar de deseable que llega o por allí aparece, lobos, más bien ovejas lerdas, hambrientos al acecho y al ataque día y noche y pastor que los controla como buenamente puede y ella que, lógica perdidamente, se enamora y él que, obligatoria obviamente, la protege, corresponde, y lo demás es silencio o no, desgraciadamente, tanto). Como tampoco es muy de recibo que los protagonistas o rufianes buenos en estos casos estén siempre rodeados de sabandijas abyectas sin el menor peso o categoría humana alguna (grupo salvaje), a la par que las larvas (ahí sí que te quiero ver animalista de pro o a pie mío, querido, cuidándolas a ellas, reivindicando sus pisoteados derechos, sacándolas del inmerecido oprobioso olvido).
El reguero final de muertes es también lamentable y ridículo, no sé cuál más, si la del padre en busca del dinero, a por uvas, la del hijo que tiene lo suyo, gran importante cenutrio, la de Martin hablando hasta el último suspiro o la de Stewart a plazos, de rebajas, en diferido, ni uno vivo, no es un bel morir ni un agradable hito. Un destrozo, en resumen, y un disparate, una importante chapuza, de las que luego se recuerda, de las que te sacan canciones y te hacen himnos, una pena.
Digámoslo así o ya, lo antes posible para que menos duela, es ella la que arruina la función o faena, esa sentimental deriva de la historia absurda, previo paso por el consabido, tópico hasta el delirio, intento de violación sin descanso, continuo (lo hemos visto millones de veces eso; grupo de hombres solitarios en la escapada o el trabajo que duermen al raso en película del oeste, mujer la mar de deseable que llega o por allí aparece, lobos, más bien ovejas lerdas, hambrientos al acecho y al ataque día y noche y pastor que los controla como buenamente puede y ella que, lógica perdidamente, se enamora y él que, obligatoria obviamente, la protege, corresponde, y lo demás es silencio o no, desgraciadamente, tanto). Como tampoco es muy de recibo que los protagonistas o rufianes buenos en estos casos estén siempre rodeados de sabandijas abyectas sin el menor peso o categoría humana alguna (grupo salvaje), a la par que las larvas (ahí sí que te quiero ver animalista de pro o a pie mío, querido, cuidándolas a ellas, reivindicando sus pisoteados derechos, sacándolas del inmerecido oprobioso olvido).
El reguero final de muertes es también lamentable y ridículo, no sé cuál más, si la del padre en busca del dinero, a por uvas, la del hijo que tiene lo suyo, gran importante cenutrio, la de Martin hablando hasta el último suspiro o la de Stewart a plazos, de rebajas, en diferido, ni uno vivo, no es un bel morir ni un agradable hito. Un destrozo, en resumen, y un disparate, una importante chapuza, de las que luego se recuerda, de las que te sacan canciones y te hacen himnos, una pena.