Durante los 48 minutos que duré frente al televisor viendo este bodrio con tintes feministas me pregunté en dos ocasiones la razón por la cual Gerard Butler participó aquí. Hilary Swan venía de tener un enorme éxito como prometedora y tenaz aspirante a boxeadora en la gran cinta de Clint Eastwood "Million Dollar Baby" (2004), y debió de estar bajo los efectos del alcohol durante el trascurso del rodaje y presentación del mismo, así como en la firma del contrato del film para poder entender también la razón de participar en ésto.

Por otro lado, que un personaje femenino golpee a un hombre tirandole tacones a la cara por tres veces y él siga queriendo estar con ella, me parece estúpido y de poco amor propio. Aunque en uno de mis relatos con más éxito puse algo parecido, pero porque sabia que a la feminista de turno del jurado le gustaría algo así y no me equivoqué. Pura sapienza antropológica digamos... Cuando, y ya en el film que nos ocupa, escuché la respuesta tan estúpida que tiene el personaje de Lisa Kudrow al reprenderle un amigo suyo el comportamiento tan superficial que tiene para con los hombres... Ya apagué la tele y me puse a otra cosa menos absurda que ver un film cuyo mayor aliciente es ver: NADA. Cuando llevas casi cincuenta minutos viendo una película y has mirado el reloj tres veces mala señal.