Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Voto de Beto:
7
Drama Pierre Wesselrin es un músico bohemio y sin dinero que vive en París. Un día, recibe un telegrama en el que se le notifica la muerte de su acaudalada tía. Como ella sólo tenía dos parientes vivos, Pierre piensa que él recibirá, al menos, parte de la herencia, así que celebra una fiesta para celebrar la noticia con sus amigos. (FILMAFFINITY)
22 de abril de 2013
6 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
En 1959 Rohmer filma, éste, su primer largometraje. Son los momentos iniciales de la "Nouvelle vague", nombre originado por su maestro André Bazin y "Cahiers...", que el mismo Rohmer, y durante siete años, estará dirigiendo. Es el año en que en Cannes (y el mundo) triunfa Truffaut y "Los 400 golpes" (curiosamente, también Marcel Carné), el primer hito fundacional, y Resnais, con el segundo, "Hiroshima mon amour" (mucho más experimental). Como vemos, el sitio justo en el momento preciso (dejo de lado a Malle que en 1957 y 1958 filmó las legendarias "Ascensor para el cadalso" y "Los amantes", por estar siempre aparte). De todos modos no ubico, a pesar de la fecha, a "El signo..." porque compartiendo ideas con sus amigos, los dos citados junto con Chabrol, Rivette y Godard (que aparece unos minutos en esta película) y el nombrado Bazin, en Rohmer aún hay restos del Existencialismo sartreano. Hay en ella, aunque disfuminados, rasgos estilísticos del futuro creador, sí, pero priva, el pensamiento del filósofo francés. "Condenado a ser libre", su "existencia se construye (...) nadie es nada de lo que haya querido ser" , pueden ser atributos del protagonista, músico frustrado y, genio y figura, DIGNO vago empedernido que se deja llevar por la existencia elegida. Es, con todo, un más que brillante inicio para una larga y prolífica producción. Ya muy bien filmada, su cámara es más que nunca su escritura (los diálogos son, comparado con su característica posterior, muy pocos). Un rasgo simpático es la "colaboración desinteresada" (hoy sería un "homenaje") de amigos como Masha Méril, Marie Dubois, el citado Godard y otros que, tal vez, no reconocí por su juventud. Con un defecto, que luego solucionó, una cierta excesiva duración, el film es un regalo altamente recomendable para los que amamos al autor de "El rayo verde".
Beto
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow