Pues eso, que me ha parecido que se quedaba a medio camino la narración. Porque me faltan cosas, me faltan oscuridades, me faltan explicaciones, me faltan argumentos: y me sobran alabanzas, idealizaciones, justificaciones.
Si hay algo innegable que argüir de este ser humano, es su magnetismo: Sí, Hedy destilaba una belleza descomunal, su imagen desprendía un magnetismo brutal, fruto de esas líneas perfectas que perfilaban su rostro. No me extraña por tanto que todo el mundo cayera rendido ante ella.
Se nos vende un personaje golpeado, vilipendiado, usurpado de su personalidad por los distintos intereses de quienes la rodeaban, ninguneado, despreciado incluso. Se nos vende feminismo, heroísmo, elefantismo. Y no estoy negando que Hedy fuera una brillante mujer, lo tuvo que ser para alcanzar ese esplendor de forma tan fulgurante, y para ser capaz de idear las cosas que imaginó.
Sólo aparecen en el documental las alabanzas, los elogios de sus cercanos, o de los buenistas arrepentidos. Tendré que hablar yo de lo que no se dice, y que observo en esta biografía (porque no he leído ni estudiado nada de ella, no conozco lo más mínimo ni lo he intentado averiguar).
Era, lo dice la cinta, una mujer perteneciente a la clase alta, por su familia. Y en esa línea se va a mover durante toda su vida, con todas sus parejas, tropecientas, pero todos ricachones, no se anduvo con chiquitas, ella misma se rodeó de lo que eligió, y no me extraña que saliera escaldada, Hedy era una mujer brillante, y los pesos pesados con los que compartió su vida nunca iban a soportar ese brillo.
Su padre se lo dijo desde pequeña, que quería que ella alcanzara todo su potencial, que fuera ella misma. Sí, un hombre fue quien se lo dijo, no creo que fuera algo tan raro.
Pero ella comprendió el poder que le daba su belleza, y lo utilizó, y gracias a ello entró en un mundo (Hollywood) que es todo él plástico, que hay mucha pasta, que por entonces el discurso que se difundía era el discurso machista (hoy te están clavando otro discurso, no mejor, simplemente otro discurso). Habla al final de la cinta de los egos, pero ella tuvo que tener también bastante de lo que criticó.
Tengo que penalizar también de este documental, que en un momento dado, cuando empieza el declive de nuestra protagonista, se explica todo de una manera confusa y embarullada, se concentra demasiado la información (esto casi a lo largo de todo el metraje), y ello hace que no queden claras las verdaderas circunstancias que le acontecieron a Hedy.
Se habla varias veces de que no le dieron en las películas los papeles que le hubieran otorgado un mayor prestigio como actriz. Pero a mí no me ha quedado claro que se los había ganado, de hecho me da la impresión que su crecimiento fue meteórico gracias a su belleza, pero le faltaba trabajo de tablas.
Se hace mucho hincapié en el invento que le "robaron" durante la segunda guerra mundial. Se da mucho énfasis a lo que económicamente hubiera supuesto el cobrar la patente.
Pero me he quedado sin saber realmente cómo era esta mujer, que para mí habría sido lo más interesante. El rechazo a sus orígenes judíos me extrañó. Su voz grabada en la etapa final nos permite entenderla un poco, pero entonces ya es otra mujer, una mujer destruida. Tengo la impresión de que se metió en un mundo que no era para ella, pues era una mujer sensible, pero le pudo la ambición.
Documental interesante pero incompleto. Un 6 pelado.