Media votos
5,8
Votos
1.897
Críticas
53
Listas
7
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de Kain6382:
10
7,5
5.533
Comedia
Mamá Cora, muy cerca ya de los ochenta años, tiene tres hijos y una hija. Vive con uno de ellos, que pasa serios apuros económicos. Un día la familia se reúne para celebrar una comida de aniversario, y es en ese momento cuando se plantea el gran dilema: ¿Quién se hará cargo de ella llevándosela a su casa? El peliagudo asunto se complica cuando reciben la noticia de que la anciana se ha tirado a la vía del tren. (FILMAFFINITY)
20 de marzo de 2012
9 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Todos los personajes están muy bien definidos. El guión se sale. Los diálogos son hilarantes. ¿Qué más se puede pedir? Del estilo de “La cena de los idiotas”, un escalón por encima.
Se tocan un montón de temas: corrupción, cinismo, infidelidades, pobreza, vejez, etc. Prácticamente es imposible que 90 minutos den para más.
En ningún momento decae, y conforme avanza hacia el final, se va haciendo cada vez más divertida e interesante. Es más, tuve que pausar porque no podía más.
PD: Hay que estar muy atento a los diálogos
PD2: Más en spoiler
Se tocan un montón de temas: corrupción, cinismo, infidelidades, pobreza, vejez, etc. Prácticamente es imposible que 90 minutos den para más.
En ningún momento decae, y conforme avanza hacia el final, se va haciendo cada vez más divertida e interesante. Es más, tuve que pausar porque no podía más.
PD: Hay que estar muy atento a los diálogos
PD2: Más en spoiler
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Si me tuviera que quedar con una escena... quizás la del borracho, cuando ve a la vieja, y creyendo que estaba muerta, suelta un “Esto es una señal de dios. Ya no bebo más”
O quizás la de las empanadillas. O el “reconocimiento” del cadáver. O el autodiálogo de mamá cora respecto al marido “Nunca nos faltó de nada... Pasamos mucha hambre, pero nos tenía como a una reina y príncipes”. En fin, son innumerables las escenas divertidas y es casi imposible quedarse con una.
O quizás la de las empanadillas. O el “reconocimiento” del cadáver. O el autodiálogo de mamá cora respecto al marido “Nunca nos faltó de nada... Pasamos mucha hambre, pero nos tenía como a una reina y príncipes”. En fin, son innumerables las escenas divertidas y es casi imposible quedarse con una.