Una buena premisa argumental como la tiene EL MENU, es suficiente para sustentar toda una película de casi 100 minutos, la respuesta es NO.
La ambientación es magnífica, la puesta en escena teatral ayuda en sumergirnos en esa cena, de alto standing, pero lo que quiere ser una crítica a todo y a todos, empezando por esos cocineros, los nuevos ídolos del siglo XXI que aspiran a ser los jovenzuelos, a los comensales gente de poder adquisitivo elevado, que más que disfrutar de los platos, solo acuden a estos lugares, por comentarlo y hacerse la foto, pues todo ello al final se convierte en la nada más absoluta.
Y porqué os preguntaréis, muy fácil porque todo o casi todo lo que sucede durante la presentación de este menú tan peculiar, es una sucesión de set pieces, a cual más inverosímil e imposible de creer.
Por cierto la mezcla de géneros, no le sienta nada bien, podrían haberse centrado en el Terror, el suspense, etc pero esto debe ser fallo de MARK MYLOD, el director por querer abarcar mucho.