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Voto de Johan Liebhart:
7
6,1
46
Animación. Ciencia ficción
En un futuro lejano los humanos viven en refugios subterráneos. Todo el mundo se hace la misma pregunta: ¿Por qué se ha ido el mundo a la ruina, y qué es lo que ha provocado que los humanos se tengan que refugiar bajo tierra? Todos los días los miembros del "Bureau of Proto Society" debaten las causas de lo sucedido, obteniendo la poca información existente de viejos documentales. (FILMAFFINITY)
1 de abril de 2020
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tras la sugerente «Eve no Jikan» y la curiosa mini-serie «Patema Inverted», Yasuhiro Yoshiura nos presenta otra interesante propuesta de distopía o falsa utopía, enmarcada en el proyecto AnimatorExpo creado directamente para su estreno online. La base para la historia, que para este caso sirve como sinopsis, es la siguiente:
La humanidad tal y como la conocemos en nuestros tiempos se ha extinguido, dejando atrás solamente algunos trazos de cultura. Una nueva humanidad, rehecha tras las cenizas de la debacle, forma un sistema de gobierno autoritario que se encarga de revisar el legado audiovisual de la vieja humanidad para comprender el motivo de su extinción y no cometer sus mismos errores.
Un divertido ejercicio de imaginación sobre un futuro catastrófico donde la desconexión absoluta con el pasado y la falta de memoria colectiva condicionan y dificultan la recomposición "correcta" de la "historia" y las imágenes de "realidad" humanas.
Con una animación fluida y bien trabajada al nivel de calidad media que acostumbra el estudio Trigger, se despliega como un buen chiste, cuyo final es un golpe de efecto tan inesperado como gracioso.
La humanidad tal y como la conocemos en nuestros tiempos se ha extinguido, dejando atrás solamente algunos trazos de cultura. Una nueva humanidad, rehecha tras las cenizas de la debacle, forma un sistema de gobierno autoritario que se encarga de revisar el legado audiovisual de la vieja humanidad para comprender el motivo de su extinción y no cometer sus mismos errores.
Un divertido ejercicio de imaginación sobre un futuro catastrófico donde la desconexión absoluta con el pasado y la falta de memoria colectiva condicionan y dificultan la recomposición "correcta" de la "historia" y las imágenes de "realidad" humanas.
Con una animación fluida y bien trabajada al nivel de calidad media que acostumbra el estudio Trigger, se despliega como un buen chiste, cuyo final es un golpe de efecto tan inesperado como gracioso.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
La caverna de Platón y la cultura-pop llevada al extremo de lo absurdo. Valdría también como título.
Aun así, da pie a reflexiones interesantes sobre cuantas partes de nuestra historia serán constructos falseados y reimaginados por la distancia del tiempo o por bases y revisiones equívocas que fueron acumulando errores sobre testimonios y documentaciones imprecisas que se tomaron como correctas de antiguos historiadores con más imaginación que rigor. A lo largo del tiempo, quizás hayan sido las religiones mayoritarias, con sus infinitas versiones de los textos sagrados entre el mito y la historia, las que hayan tenido más dificultades en desentrañar la ficción de la realidad. Las invenciones y las revisiones falsarias de los Papas y teólogos del medievo para promover un pensamiento homogéneo y evitar disidencias en la población son objeto de estudio y evidencias claras de este fenómeno.
Por otro lado, también da pie a miles de versiones reimaginando su argumento... ¿Y si solo sobrevivieran al cataclismo las películas de Marvel y DC? ¿O las películas de terror al estilo Freddy Krueger y otros monstruos psicopáticos? O, peor aún, ¿Y si solo sobrevivieran la filmografía de Uwe Boll y la pornografía de tentáculos nipona? En fin, que Dios nos pille confesados...
Aun así, da pie a reflexiones interesantes sobre cuantas partes de nuestra historia serán constructos falseados y reimaginados por la distancia del tiempo o por bases y revisiones equívocas que fueron acumulando errores sobre testimonios y documentaciones imprecisas que se tomaron como correctas de antiguos historiadores con más imaginación que rigor. A lo largo del tiempo, quizás hayan sido las religiones mayoritarias, con sus infinitas versiones de los textos sagrados entre el mito y la historia, las que hayan tenido más dificultades en desentrañar la ficción de la realidad. Las invenciones y las revisiones falsarias de los Papas y teólogos del medievo para promover un pensamiento homogéneo y evitar disidencias en la población son objeto de estudio y evidencias claras de este fenómeno.
Por otro lado, también da pie a miles de versiones reimaginando su argumento... ¿Y si solo sobrevivieran al cataclismo las películas de Marvel y DC? ¿O las películas de terror al estilo Freddy Krueger y otros monstruos psicopáticos? O, peor aún, ¿Y si solo sobrevivieran la filmografía de Uwe Boll y la pornografía de tentáculos nipona? En fin, que Dios nos pille confesados...