Fría, directa, ambiciosa, magnética, intensa, oscura e impactante producción de suspense, que consigue despertar el interés desde un primer instante, llevando al espectador a toda una epopeya que no deja indiferente.

Cuando una dulce e ingenua joven encuentra en el metro un bolso extraviado, decide entregárselo a su legítima dueña. Rápidamente se convierten en amigas, pero su amistad cambia cuando se descubren las siniestras intenciones de la dueña del bolso.

Neil Jordan, apuesta por una incursión en el thriller psicológico y de suspense, con una base original y terrorífica por momentos.

No es un producto que vaya a entusiasmar a todo tipo de público, pero ya os aseguro que ofrece lo que se espera de él. Una trama potente de intrigas e intereses personales, que deriva en un frío y poderoso desenlace.

Cuenta con un tratamiento serio y estilizado de la imagen, con el que el director Neil Jordan, logra desarrollar una trama increíble y sumamente atractiva.

La selección del reparto está a la altura del relato y cada uno de los diferentes personajes, presenta claros aspectos definitorios, que hacen comprender e intuir el desarrollo de algunas situaciones.

Hay algo excesivo e histriónico en la interpretación de las protagonistas, que hace que la historia llegue a conquistar la emoción del público.

La presencia y poderosa labor interpretativa de: Isabelle Huppert y Chloë Grace Moretz, hace que la película tenga un efecto chicle, que atrapa por completo.

La viuda, queda como una metódica e inquietante producción de suspense psicológico, con la que disfrutar de sus dos estrellas protagonistas: Isabelle Huppert y Chloë Grace Moretz.