Estoy de acuerdo con la sinopsis que Filmaffinity hace de esta película, excepto en que sea dramática. A menos que sea porque transcurre durante la Gran Depresión, no cabe calificarla más que como una divertida road-movie. Ryan O´Neal convence, pero sí es cierto que su hija Tatum mereció el Oscar con tan sólo 9 años. No sólo por la expresividad de su rostro apropiada para cada momento, sino porque da mucha más chispa a la comedia y por la evolución de su personaje, convertida en una pequeña pícara que aprende a embaucar incluso mejor que su mentor.
Mi nota: 7,7