"La tumba del emperador Dragon" ha seguido fielmente la línea de la saga...línea descendente, me refiero. Tras una aceptable (por novedosa) primera parte, y una algo decepcionante segunda parte, esta tercera no aporta nada nuevo, aparte de muchos despropósitos. El aventurero Rick O´Connell y su mujer Evelyn se encuentran retirados, y han decidido hacer vida normal, pero se aburren más que una ostra sin hacer nada estimulante. Mientras tanto, Alex, el hijo (bastante crecidito, por cierto) de esta aventurera pareja, se encuentra en Pekín en una excavación, haciendo un descubrimiento muy importante: la tumba del emperador Dragón, con todo su ejército momificado. Para animar la peli, ofrecen a la pareja el hacer una entrega de un valioso objeto, destino Pekin (mucho mejor ellos que Seur). Lo que no sabrán es que ese objeto puede desencadenar una catástrofe. Allí se encontrarán a su hijo, con el cual mantienen una tensa relación, y con el hermano de Evelyn, Jonathan, el patoso de la saga. Como es evidente, la momia, el emperador Han acabará despertando y causando el caos, por lo que nuestros amigos, ayudados por una pareja, madre e hija que vivieron en la época del emperador Han, deberán detener al poderoso emperador antes de que éste se haga inmortal y se apodere del Planeta.

Con esta sinopsis, seguro que pensaréis lo mismo que yo: ¿en esta peli no hay nada nuevo? No, es lo mismo de siempre, pero con un guión aún más simple y sin la capacidad de sorpresa de la primera entrega. Lo dicho anteriormente, un guión muy tontorrón, es cierto que hay algún momento en el que te hacen esbozar una sonrisa, pero muy pocos durante la peli. Sigue una marcha bastante lineal y nada se sale de lo previsto, aunque si hay que destacar alguna sorpresa, no son positivas, algo tan chorra como una panda de Hombres de las Nieves que patean el culo a los malos y lo celebran como si jugadores de Fútbol Americano se tratara. Lo único destacable, evidentemente, son los efectos especiales, que no decepcionarán, al igual que en las anteriores de la saga, pero no creo que sea suficiente con esto para hacer una buena peli...que además dura casi 2 horas que se hacen muy largas.

En cuanto a los actores, Brendan Fraser en su papel de siempre, no destaca especialmente, pero como ya está acostumbrado a hacer lo mismo, lo hará correctamente. Maria Bello entra por Rachel Weisz (que es mejor actriz, a mi parecer), lo que al principio descuadra un poco. Luke Ford hace de hijo crecidito de esta pareja, poco más y son de la misma generación, se podían haber buscado a alguien mas yogurín, o haber envejecido a la pareja. Y Jet Li en su papel de siempre, repartiendo patadas voladoras.

En definitiva, una película que no te aportara nada nuevo, y si puedes dejarla para cuando la den en la tele el viernes por la noche, mucho mejor, que si te duermes al menos lo harás en tu casa. Si es que las terceras partes nunca fueron buenas...