La historia en general: todo el tiempo se está tratando de refutar al "falso psíquico", siendo entonces una película de "ciencia vs. psíquicos". Pero no, porque se termina con la conclusión de que los psíquicos reales sí existen. ¿Y entonces ¿cuál era el punto? Lo lógico hubiera sido dejar un final abierto, con la insistencia del protagonista por negar la existencia de estos poderes por el daño que generaron a su madre, que fervientemente creía en ellos y fue engañada por un impostor, para luego quedar en la duda de si en realidad existen dado los eventos de la película. Pero no, se confirma que sí. Y entonces el protagonista simplemente fue un idiota que no se dio cuenta antes de ello. En fin, no le encuentro el sentido de la historia contada.

En cuanto a los personajes, como dije, el de Cillian Murphy es el que se opone fervientemente a los que se proclaman psíquicos por su traumático pasado. Pero cuando logra desenmascarar al que el mundo creía como verdadero, GRACIAS A SER UNO VERDADERO ÉL MISMO, todo se transforma en un irónico mal chiste. Lo justifican con "el deseo subconsciente de buscar otros como yo". Pero eso no sirve, porque lo que él siempre odió fue a los falsos psíquicos, sin creer que existiera tal poder. Al confirmarse que él es uno verdadero, no cambia nada en cuanto a su odio para con los falsos psíquicos. Ahora sí se justifica la creencia de su madre en la existencia de tales poderes, pero eso no agrega mucho de catarsis en su historia. De nuevo, el saber que él tiene esos poderes deja su odio para con los falsos intacto, ya que no es cuestión de creer o no, sino de tenerlos como él o no. Su odio en algún punto seguiría "justificado", ya que los verdaderos existen, pero él nunca se planteó eso, sino que se enfocó en su odio a los falsos. Y el personaje que odiaba era falso. En fin. Me parece una resolución patética.

El personaje de Sigourney Weaver siempre fue escéptico, por eso mantenía a su hijo en coma por 20 años, ya que no creía en la existencia de "un más allá" o de lo sobrenatural. Y muere antes de enterarse que es posible que lo haya, por los poderes en su asistente. Entonces... Tampoco encuentro arco ni catarsis en su personaje.

Tenemos al personaje de Elizabeth Olsen, la estudiante que tiene un amorío con el personaje de Murphy. Su único y mínimo rol en la película es arruinarla más. Su impacto es estar junto al personaje de Cillian durante escenas paranormales que le ocurren, lo que confirma que ellas realmente están pasando, sacando toda posibilidad de que ocurrieran en la cabeza del protagonista. ¿No hubiera sido mejor mantenernos intrigados ante esa posibilidad de que nada fuera realidad y nosotros interpretemos? Y en definitiva, ella es otro personaje sin ningún arco.

Por último, el falso psíquico, interpretado por De Niro, que resulta ser... un falso psíquico. Listo. Sin arco. Nada. Es lo que es, o sea "no es nada".

Esta película es un desastre absoluto. Es un desastre o no la entiendo para nada.