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Voto de Recuerdo:
3
Drama Un viejo pescador vive en medio del mar con una muchacha a la que recogió cuando era niña. El viejo pescador espera que ella cumpla 17 años para desposarla. Mientras tanto, prepara la dote, la protege contra los hombres que vienen a pescar a su barco e intentan propasarse con ella. Su única forma de protegerla es disparando con el arco, un arco que también le sirve para adivinar el futuro y como instrumento musical. Un buen día, un ... [+]
19 de octubre de 2014
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El director coreano Kim Ki-duk, se ha consolidado como uno de los máximos exponentes del cine oriental visto desde occidente. Gran parte de sus películas son seleccionadas por festivales de alta categoría para que una crítica, en su mayoría rendida a sus pies, encuentre en ellas lo que se escabulle una y otra vez en otros productos que nada aportan, a un mermado mercado de imágenes sin sentido.
Tras el tremendo impacto que provocó “La isla” en el año dos mil, “Primavera, verano, otoño, invierno… y primavera” supuso tres años más tarde, una estupenda bocanada de aire frío que se vio arrastrada por la extrema calidez de “Samaritan Girl” y, por la, tal vez, demasiado aplaudida y multipremiada “Hierro 3”.

Director prolífico e incansable, es autor de todos los guiones que filma, no cesa en su empeño de dotar a sus trabajos de una extraña poesía visual. Desconcertante, violenta, subyugante… el camino para comprender lo mostrado, tal vez sea el mejor de los secretos visibles para seguir acudiendo a contemplar un cine, que en realidad, esconde mucho más de lo que enseña. Porque, por mucho que nos esforcemos en descifrar las actitudes de sus jóvenes protagonistas, nunca llegaremos a saber a ciencia cierta el por que de unas acciones que se quedan flotando en un aire viciado por lo consumido. Y ese, es el verdadero motivo de que lo escondido sea realmente el significado de su cine. Allí, a donde debemos dirigir nuestra atención. Allí, en donde somos presa de lo que nunca sabremos.

En “El arco”, la retórica de la poesía hace mella en un fin extremadamente alargado en el tiempo. Pero aun así, el mero hecho de creerse que un espectador que está siendo manipulado por lo incomprensible, la hace aconsejable para esos espíritus abiertos a lo absurdo. A lo que, tal vez, ni lo propios personajes de la historia narrada son conscientes. Personajes perdidos a la deriva de un amor por gastar. El impropio a lo ajeno.
Recuerdo
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