No quiero entrar mucho en las muertes porque son realmente lamentables. Los cuerpos de las victimas tienen la consistencia de un yogur.

Tampoco quiero comprobar el tema de las veces que se “teletransporta” el sheriff, porque eso supondría tener que verla una segunda vez y no apetece.

En ocasiones, te da la sensación de que han eliminado demasiadas escenas porque si no, no se explica que haya personajes aparentemente importantes que, sin motivo alguno, desaparecen más de media película y otros que apenas intervienen en una frase, de repente, resulta que su muerte nos tiene que importar (la chica rubia).

El villano es bastante ridículo y sus asesinatos carecen de planificación alguna.
Un ejemplo es el asesinato de la camarera: Su plan consistía en subirse en su coche y esperar a que la mujer saliera en esa dirección y no solo eso, sino que se parara justo delante.

En los slasher buenos, cuando la víctima se esconde, lo que realmente te pone de los nervios es no saber dónde esta el villano, lo clásico es enfocar a la víctima. Pues en esta no. En esta, ocurre como 2 o 3 veces que la víctima se esconde y se pone el foco en el villano enmascarado intentando encontrarla y te queda algo parecido a grabar a mi padre intentando encontrar las llaves del coche, pero en este último existe más tensión.