El título resume lo más evidente: esta serie tiene carácter.

De primeras ya entra a cualquiera desde su opening (la banda sonora entera es espectacular). Pero es que esta serie es un western espacial marronero, no puede no gustarte. Empieza pareciendo una serie más para pasar un buen rato pero que sabes que se tomará su tiempo para tener momentos más dramáticos y personales solo con el primer capítulo y su inicio. Y eso es así, aunque los argumentos de los capítulos (que se inician, desenvuelven y cierran en el mismo) a priori puedan parecer normalitos, cosa que en la mayoría de los casos pasa, cada uno nos dice algo sobre los personajes, sus inquietudes y motivaciones. Hay que ver algo más allá.

Lo dicho. La serie mantiene y desarrolla unas tramas alrededor del pasado que son muy buenas y sofisticadas, enganchan, pero se rompen un poco con la trama particular de cada capítulo, lo que hace que te olvides un poco. Pero eso error se va enmendando poco a poco y mejorando hacia el final.

En el plano más técnico la serie es convencional con sus flashback y sus cosas, con un montaje bastante bueno, por cierto; pero no te pillará por sorpresa ni te reventará la cabeza. En ocasiones se explican demasiado incluso cuando pueden decir lo mismo pero con menos. Pero bueno, no estropea el conjunto general de la serie. Me dicen que tiene muchos tropos y clichés del anime, pero vaya, yo no sé de anime, así que hasta aquí puedo escribir.

Que la veáis, vaya.