Pixar nos trae con Red una historia de esas que podemos enmarcar como divertida, entretenida, pero sobretodo, de las que te hacen pensar y meditar en lo que cuentan.

La protagonista es una niña de lo más normal, con una vida normal y con sus amigas normales, nada fuera de lo común, con la salvedad que vive acorde con las normas que le marca su madre y a la que jamás quiere decepcionar, creando esto una presión extra en su día a día. Ella viviría de otra forma si no fuese por ese excesivo control a la que es sometida.

Para colmo en un momento dado de su adolescencia, se encuentra con que se transforma en un oso rojo cuando no consigue dominar sus sentimientos. No entiende la razón, pero ya se encargará su madre y su familia en general de explicarle las razones. En un principio lo que parece una maldición, hará que no solo aprende a convivir con esa "maldición" sino que le saque partido en su propio beneficio.

El trío de amigas aporta y mucho, creo que es uno de los aciertos de la película, niñas rodeadas de niñas y mostrándolas tal cual, con sus tonterías, sus secretos, sus inquietudes y al ser las tres tan diferentes, la aportación es magistral.

Me ha gustado también el tema musical viéndolo desde la perspectiva de las niñas, una ilusión que la mayoría de nosotros hemos vivido alguna vez, la posibilidad de ver en directo a nuestro grupo musical preferido.

Una vez más Pixar acierta de pleno.