Media votos
8,9
Votos
453
Críticas
311
Listas
1
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Mis críticas favoritas
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de burton:
10
7,0
2.076
Comedia
Una pareja de bailarines que habían saltado a la fama gracias a su perfecta imitación de Ginger Rogers y Fred Astaire se reúnen años después en Roma para aparecer en un programa de televisión. El regreso de la pareja resultará bastante traumático para los dos. (FILMAFFINITY)
20 de diciembre de 2006
41 de 45 usuarios han encontrado esta crítica útil
Espléndido cuento de navidad del Fellini más entrañable, melancólico y paradójicamente más accesible que nunca.
Y ello a pesar de que la película es una feroz y despiadada crítica en tono de sátira hacia el mundo de la televisión y del consumismo bajo el aspecto de la publicidad, con mensajes subliminales como aquel Fulvio Lombardoni, mecenas de tres al cuarto que recurrentemente aparece a lo largo del metraje de la cinta, bien en forma de vendedor ambulante demagogo y populista, vendiendo longaniza y lentejas (muy apropiado en el país transalpino para la época de navidad en que está ambientada la película) en la entrañable estación de Términi, bien en la forma de publicidad masiva e incitante al consumismo atroz...en Italia se dijo que dicha figura correspondería a la emergente figura en aquel entonces del más tarde archiconocido Silvio Berlusconi...
Fellini se muestra pesimista hacia una sociedad cada vez más alienada, criticando esa publicidad masiva que él consideró odiosa con aquella legendaria referencia suya sobre el asunto cuando en una ocasión sentenció aquello de, "...La publicidad interrumpe la emoción", pues Fellini odiaba sentarse a ver una película y que de repente la dichosa publicidad la interrumpiera, y ello a pesar de que él también participó de aquel mundo con sus famosos anuncios sobre la pasta Barilla...
Todo ese mundo discordante es roto por esos fantasmas surgidos de la oscuridad del pasado y que con el paso del tiempo también se esfumarían con el implacabla paso del "tempus fugit"...aquella simpática pareja de artistas interpretados por unos DESCOMUNALES Giulietta Masina y Marcelo Matroianni que durante 15 años, en los 40 y principios de los 50, formaron pareja artística imitando aquella legendaria pareja de baile de Fred Astaire y Ginger Rogers por los teatros de Italia y que ahora, 30 años después y en los inicios de los 80, son reunidos por el programa de tv "Ed ecco a voi (con todos uds)", que acoge a toda una colección de frikis varios acorde con los nuevos gustos de una sociedad cada vez más hueca y vanal y obsesionada por el consumismo atroz...
Desesperanzados, ambos artistas creen estar en un sitio, lugar y tiempo equivocados, e intentarán huir...aunque sea demasiado tarde y el tip-tap o claqué del "Chick to Cheek" haya comenzado...
Una de sus películas mejor narradas y filmadas, para una película magistral llena de mágicos e inolvidable momentos,y ello aún a pesar de que el maestro nos retratara una Roma sucia y hedionda, tal vez como símbolo de la corrupción que estaba viviendo a todos los niveles...
Como dicen los italianos una película indimenticabile (inolvidable) que a buen seguro hará las delicias del espectador y de la que Almodóvar tomó buena nota para su posterior filmografía, pues algunos de sus habituales y estridentes personajes salieron de esta troupé felliana del "Ginger e Fred" de Fellini...
I M P R E S C I N D I B L E.
Y ello a pesar de que la película es una feroz y despiadada crítica en tono de sátira hacia el mundo de la televisión y del consumismo bajo el aspecto de la publicidad, con mensajes subliminales como aquel Fulvio Lombardoni, mecenas de tres al cuarto que recurrentemente aparece a lo largo del metraje de la cinta, bien en forma de vendedor ambulante demagogo y populista, vendiendo longaniza y lentejas (muy apropiado en el país transalpino para la época de navidad en que está ambientada la película) en la entrañable estación de Términi, bien en la forma de publicidad masiva e incitante al consumismo atroz...en Italia se dijo que dicha figura correspondería a la emergente figura en aquel entonces del más tarde archiconocido Silvio Berlusconi...
Fellini se muestra pesimista hacia una sociedad cada vez más alienada, criticando esa publicidad masiva que él consideró odiosa con aquella legendaria referencia suya sobre el asunto cuando en una ocasión sentenció aquello de, "...La publicidad interrumpe la emoción", pues Fellini odiaba sentarse a ver una película y que de repente la dichosa publicidad la interrumpiera, y ello a pesar de que él también participó de aquel mundo con sus famosos anuncios sobre la pasta Barilla...
Todo ese mundo discordante es roto por esos fantasmas surgidos de la oscuridad del pasado y que con el paso del tiempo también se esfumarían con el implacabla paso del "tempus fugit"...aquella simpática pareja de artistas interpretados por unos DESCOMUNALES Giulietta Masina y Marcelo Matroianni que durante 15 años, en los 40 y principios de los 50, formaron pareja artística imitando aquella legendaria pareja de baile de Fred Astaire y Ginger Rogers por los teatros de Italia y que ahora, 30 años después y en los inicios de los 80, son reunidos por el programa de tv "Ed ecco a voi (con todos uds)", que acoge a toda una colección de frikis varios acorde con los nuevos gustos de una sociedad cada vez más hueca y vanal y obsesionada por el consumismo atroz...
Desesperanzados, ambos artistas creen estar en un sitio, lugar y tiempo equivocados, e intentarán huir...aunque sea demasiado tarde y el tip-tap o claqué del "Chick to Cheek" haya comenzado...
Una de sus películas mejor narradas y filmadas, para una película magistral llena de mágicos e inolvidable momentos,y ello aún a pesar de que el maestro nos retratara una Roma sucia y hedionda, tal vez como símbolo de la corrupción que estaba viviendo a todos los niveles...
Como dicen los italianos una película indimenticabile (inolvidable) que a buen seguro hará las delicias del espectador y de la que Almodóvar tomó buena nota para su posterior filmografía, pues algunos de sus habituales y estridentes personajes salieron de esta troupé felliana del "Ginger e Fred" de Fellini...
I M P R E S C I N D I B L E.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Es navidad aunque no lo parezca, y en la estación romana de Términi y proveniente de Santa Margarita arriva el tren donde viaja una invitada del programa de variedades "Ed ecco a voi (con todod uds)", la menuda Amelia Bonetti (Giulietta Masina).
Una asistenta del programa acude a buscarla y en un microbus viaja al hotel Manager junto con algunos invitados más del programa...dos dobles del cantante italiano Lucio Dalla, y una travesti (Augusto Poderosi) famosa por frecuentar las cárceles para prostituirse con los presos y hacer así según ella obras de beneficiencia.
Amelia se queda sorprendida de los personajes ya que piensa que el programa donde a la mañana siguiente actuaría junto a su antiguo compañero artístico, Pippo Botticella (Marcello Mastroianni) representando aquel número de tip tap o claqué que desarrollara durante 15 años, en las décadas de los 40 y 50, imitando a los míticos Fred Astaire y Ginger Rogers por los recogiditos teatros de la península transalpina, era un programa serio...
Desesperada espera a Pippo todo lo que resta del día a la puerta del hotel pero no llega...por la noche unos ronquidos en la habitación contigua la despiertan...se trataba de Pippo...
Hacía 30 años que ella había decidido "abandonarle" entrando él sin saberlo ella en un manicomio...ella se había casado con Enrico, un humilde empleado del que ya había enviudado y con el había tenido una hija y dos nietos.
Él, un tipo socarrón y bromista que gustaba de hacer rimas zafias sobre las sensaciones que producían los órganos sexuales femeninos en los hombres, se había casado aunque posteriormente separado con una mujer, y su negocio lo había vendido a un empresario mañico, para convertirse posteriormente en un actorucho sin suerte y posteriormente en vendedor de enciclopedias a plazos...y para quien el claqué no era sino un lenguaje en morse de los esclavos negros en la época de las plantaciones de algodón...
En el backstage del programa ambos se darán cuenta del tipo de programa del que están a punto de formar parte, plagado de frikis como bailarines liliputienses vestidos de flamencas andaluzas, ex-presidiarios cuyo único mérito a parte de cometer crímenes es tener cara de actores, una señora que escucha voces de ultratumba, la travesti, dobles de personajes como Clark Gable, Marcel Proust, Marlene Dietrich o Brigitte Bardott, almirantes llenos de condecoraciones, curas que encuentran el amor femenino sin perder el celibato, inventores de bragas comestibles con sabor incluso a pan y cebolla, tipos que hacen huelgas de hambre por las injusticias en el mundo, etc...
A penas cuentan con tiempo para ensayar...incluso Amelia está a punto de abandonar el mundo de los frikis aquel...
Finalmente actúan al ritmo del Cheek to cheek" de Irving Berlin y a pesar de que Pippo no esté en forma...
En Términi se despiden parodiando también el tema de Irving Berlin...
Una asistenta del programa acude a buscarla y en un microbus viaja al hotel Manager junto con algunos invitados más del programa...dos dobles del cantante italiano Lucio Dalla, y una travesti (Augusto Poderosi) famosa por frecuentar las cárceles para prostituirse con los presos y hacer así según ella obras de beneficiencia.
Amelia se queda sorprendida de los personajes ya que piensa que el programa donde a la mañana siguiente actuaría junto a su antiguo compañero artístico, Pippo Botticella (Marcello Mastroianni) representando aquel número de tip tap o claqué que desarrollara durante 15 años, en las décadas de los 40 y 50, imitando a los míticos Fred Astaire y Ginger Rogers por los recogiditos teatros de la península transalpina, era un programa serio...
Desesperada espera a Pippo todo lo que resta del día a la puerta del hotel pero no llega...por la noche unos ronquidos en la habitación contigua la despiertan...se trataba de Pippo...
Hacía 30 años que ella había decidido "abandonarle" entrando él sin saberlo ella en un manicomio...ella se había casado con Enrico, un humilde empleado del que ya había enviudado y con el había tenido una hija y dos nietos.
Él, un tipo socarrón y bromista que gustaba de hacer rimas zafias sobre las sensaciones que producían los órganos sexuales femeninos en los hombres, se había casado aunque posteriormente separado con una mujer, y su negocio lo había vendido a un empresario mañico, para convertirse posteriormente en un actorucho sin suerte y posteriormente en vendedor de enciclopedias a plazos...y para quien el claqué no era sino un lenguaje en morse de los esclavos negros en la época de las plantaciones de algodón...
En el backstage del programa ambos se darán cuenta del tipo de programa del que están a punto de formar parte, plagado de frikis como bailarines liliputienses vestidos de flamencas andaluzas, ex-presidiarios cuyo único mérito a parte de cometer crímenes es tener cara de actores, una señora que escucha voces de ultratumba, la travesti, dobles de personajes como Clark Gable, Marcel Proust, Marlene Dietrich o Brigitte Bardott, almirantes llenos de condecoraciones, curas que encuentran el amor femenino sin perder el celibato, inventores de bragas comestibles con sabor incluso a pan y cebolla, tipos que hacen huelgas de hambre por las injusticias en el mundo, etc...
A penas cuentan con tiempo para ensayar...incluso Amelia está a punto de abandonar el mundo de los frikis aquel...
Finalmente actúan al ritmo del Cheek to cheek" de Irving Berlin y a pesar de que Pippo no esté en forma...
En Términi se despiden parodiando también el tema de Irving Berlin...