El jubilado si no se jubiló después de Poder aboluto es que tiene más vidas que un gato. Sus personajes de cartón piedra abundan en su filmografía. Su paternalismo raya hasta una gramola. Si en la intriga es casi nulo en donde es nulo del todo es en el plano doméstico. Sus personajes en Poder absoluto retratan lo gran filósofo que es el jubilado cuando no está robando. Y decirle a Augusto M. Torres que el comienzo es una escena antológica pero la cogió descaradamente con alevosía y nocturnidad de Los crímenes del Doctor Mabuse. No hace falta decir de quién es. No podría ser que la cogiera de noche. De día no tenía bemoles. Bemoles hay que tener para tragarse a este personaje y su cine. Clint Eastwood es con mucha diferencia el director más nefasto que queda con vida.