Puestos a hacer una película de chupópteros realmente interesante, yo escribiría un guión sobre cazasubvenciones en el mundo del cine, la moda y la kultura en general, comisionistas en el mundo del fútbol o de las empresas de subcontratación o incluso de una noticia la mar de cachonda que he leído hoy en el periódico acerca de que en la Junta de Andalucía (cueva de chupasangres donde las haya) había enchufismo hasta para ser bailaor de flamenco.

Pero como parece que va a pasar algún tiempo hasta que mi idea cristalice en algo que se pueda ver en pantalla, se ve que nos tendremos que tragar algún truño como este. “30 días de oscuridad 2” no decepciona. Es un truño, sí, pero no decepciona porque es exactamente lo que cualquiera podría esperar viendo cinco munitos de trailer. Como ya sabemos todos, que una película no se estrene en cines y pase directamente al DVD no es buena señal. Si esa película, encima, es la segunda parte de una obra de cierto renombre (“30 días de oscuridad” está reconocida como original y decente, tirando a buena) no puede haber duda: algún desaprensivo ha comprado los derechos y ha hecho una zarrapastrosa continuación sin más parecido con el origen que (quizás) el nombre de los personajes y (quizás) alguna reminiscencia con la trama original.

Quizás. O quizás no. Lo que en “30 días de oscuridad” era originalidad y buen hacer, aquí es una mezcla sin sentido de tópicos más cercanos a las últimas de “Blade” que a su predecesora. Más tiros, peleas y más sangre y vísceras, que no se traducen en más acción ni más interés. No hay la más mínima continuidad entre escenas ni ganas de trabajar algo de ritmo: ahora estamos aquí y nos pasa ésto, ahora estamos allá y nos pasa esto otro, ahora echamos un kiki porque yo lo valgo, ahora me da una rayada psicológica y no te quiero volver a ver, ahora no sé como seguir y aparece un desconocido que me da casualmente la clave de todo… Y todo sin tensión, sin credibilidad, sin interpretaciones (no hay termino medio: hay actores con cara de estreñimiento toda la película, actores que miran con cara de idiota toda la película y actores que solo dan gritos toda la película) y sin algo parecido a la dignidad para respetar al espectador.

Si has visto la primera, esta es indigna. Si no la has visto, es un truño de libro. Nivel de truño: les pinchas y no sale sangre, sale… puaj