Esta película contiene una gran lección de cine acerca del ser humano y de la vocación que quiere tomar, del camino que debe hallar. En el caso de Spider-Man (Tobey Maguire), tiene dos opciones: ser Peter Parker, el chavalete de Queens haciendo los deberes, teniendo una vida tranquila, intentar no perder a su chica Mary Jane Watson (Kirsten Dunst)..., o ser el gran amigo y vecino Spider-Man. Ese es el gran acierto que todo Marvelita pueda desear acerca de esta cinta.

El villano, es el mejor villano de todas las películas de Spider-Man, El Doctor Octopus (Alfred Molina), Harry Osborn (James Franco), está un poco desaprovechado pero está genial, Rosemary Harris y J.K. Simmons son una de las piezas clave de la cinta.

Las escenas de acción son brutales, con unos efectos especiales muy trepidantes.

Está película, técnicamente es casi perfecta aunque tiene sus fallos de guión que no me ha terminado de convencer, pero detrás de esta película se ha notado muchísimo el esfuerzo que han hecho todos los que han trabajado en este proyecto.