Que conste que cada vez me gustan menos estos blockbuster americanos donde lo único interesante son los efectos especiales y alguna frase curiosa pero que son cada vez más simples, insustanciales, con explosiones atronadoras que no abandonan tus tímpanos hasta tiempo después de salir de la sala y sobre todo que a cada peli tienes la sensación de que te están robando el dinero de la manera más vil.
Bueno, pues todo esto lo tenía en la mente hasta que me acerqué por Filmaffinity, que siempre consulto, y me llevo la sorpresa de que tiene un 7. Estaba un tanto receloso pero me fié. Y desde luego fue un acierto.
La película es un blockbuster sí, pero de los que merece la pena pagar para ver en el cine. Es puro entretenimiento, aquí no vamos a pensar mucho, pero es un entretenimiento muy bien fabricado.
El director es el de Bourne, eso ya me daba confianza. Y claro, tenemos al ultrataquillero Tom Cruise (suele ser sinónimo de buena peli, aunque con Oblivion pienso que dió un traspiés) y Emily Blunt (una muy buena actriz con un futuro prometedor).
La pelicula se desarrolla con gran agilidad y rapidez sin casi darnos tiempo a respirar, y con la grata sensación de desear ver qué va a suceder a continuación.
El hecho de que cada día se repita y vuelva a pasar lo mismo a Tom se resuelve francamente bien (no va a ser como el día de la marmota, no va por ahí) mostrando escenas distintas del día, o saltando directamente a la escena importante del mismo y demás técnicas.
Por otro lado, también está la sintonía entre Tom y la Emily, que muestran buena química en la pantalla y se convierte en otro desarrollo de la trama.
En definitiva, es una pelicula que te mantiene pegado a la gran pantalla, sin bostezar, sin pensar en qué toston me he metido, es muy entretenida y con buenos efectos especiales (si, he de admitirlo, esta vez los he tolerado).
Esta hay que verla.