Cool World (Una rubia entre dos mundos)

Una curiosa experiencia que tuve precisamente con este título hace ya unos 15 años atrás es que la pasaron en señal abierta en un canal local un sábado casi a la medianoche, y yo pensé que iba a a haber mucha "acción", pero en aquel entonces fue para mi una "decepción" interesante, por asi decirlo.

Dirigida por el genial (aunque incomprendido) Ralph Bakshi y que al igual que los otros films que se ha puesto al hombro, cayeron en el olvido por parte del público y ni que decir de la crítica especializada.

Pero en esta ocasión si peca, no por dirigir un largometraje malo propiamente dicho, sino porque quienes puedan verla se harán la misma pregunta: ¿Está hecha para los niños o para los adultos? Y la respuesta es si y no.

Me explico, la historia tiene rasgos de fantasía y "dibujitos", que desde luego entran en la definición "infantil", pero en igual medida tiene las suficientes dosis de erotismo, para no verlo con los más "pequeñitos" de la casa, o peor aún que la vean ellos solos, porque de seguro se harán muchas preguntas al respecto.

Y entonces hacia quienes apunta "Cool World", la verdad no lo se, pero lo que sí se, es que pudo haber sido muchísimo mejor, si se hubiese decidido primero a quienes quería conquistar.

Del reparto lo mejor es ver a un jovencito casi desconocido llamado Brad Pitt, junto a Gabriel Byrne y Kim Bassinger, estos dos últimos los rostros más conocidos que completan este proyecto que no termina de convencer.

Es mi primera crítica, pero es que tras ver esta película no he tenido más remedio que registrarme para poner mi granito de arena con el fin de evitar que alguien pueda cometer el mismo error que yo.
La película es infame, lo cual tendría un pase de no ser por ser además pretenciosa, desagradable, absurda y técnicamente deficiente.
La presencia de Brad Pitt y la Bassiinger, junto a la promesa de ser una película al estilo Roger Rabitt puede inclinarle a darle a una oportunidad. Resista y evitará salir dos horas más tarde de mal humor y con dolor de cabeza

Jack Deebs (Gabriel Byrne) es un caricaturista que acaba en prisión después de asesinar a un hombre al que sorprende en la cama, acostándose con su mujer. Ya en la cárcel, Deebs fantasea con Holli Would, uno de los personajes de su serie de cómics 'Cool World': Holli es una rubia voluptuosa, que despierta el interés sexual del dibujante...

Deebs no sospecha que el 'Cool World' realmente existe y que uno de estos 'monigotes' del mundo animado ha creado una máquina que le permite visitar su propio mundo inventado: al final, Deebs viaja al 'Cool World', incitado por Holli: ésta desea tener una relación sexual con su creador, porque eso le permitiría convertirse en una mujer de carne y hueso... el problema es que están prohibidos los encuentros de este tipo entre 'humanos' y 'monigotes'... con todo, ambos se acuestan y Holli pasa a ser real (la encarna, nunca mejor dicho, Kim Basinger).

Sin embargo, este hecho puede tener consecuencias catastróficas para ambos mundos... para evitar el desastre, el único ser humano que vivía en el 'Cool World' (el detective Frank Harris, interpretado por Brad Pitt) deberá regresar al mundo real...

Si tuviera que resumir esta película, lo haría utilizando la única palabra que se me ocurre para definir la sensación que tuve en cuanto salieron los créditos: Anonadada.

Hacía mucho tiempo que Cool World despertaba mi curiosidad, sobre todo por los dibujos que salían y que me hacían acordarme de "¿Quién engañó a Roger Rabbit?" (veo que todos hacéis esta comparación, que es inevitable, por otra parte). Pero mi decepción ha sido bastante grande porque, en gran parte, no entendía nada de lo que estaba pasando.

El planteamiento inicial no es malo: Un presidiario utiliza su habilidad para el dibujo para crear un mundo propio al que evadirse, y se queda hipnotizado ante la sensual belleza de Holli Would, una de sus creaciones. Bien, no está mal. No soy la única que se ha enamorado platónicamente de un personaje de ficción (Aaaah, Jon Nieveeee!!!). Lo malo es que la cosa se va desmadrando cuando el dibujante llega a su propio mundo inventado, donde no veo lo cool por ninguna parte, donde los dibujos están todo el rato saltando y dándose tortas. Los únicos personajes que parecen humanos son la propia Holli y Lonette, que deben su aspecto físico a las míticas pin-ups de los 50. El resto me parece un despropósito sin final que me dejó con un raro sabor de boca.

Por si fuera poco, la trama se va por unos derroteros que no entendí. No me parece una película para niños, pero tampoco para adultos. Es extraña y confusa. Tampoco creo que sea tan original como pensaba. Pero le pongo tres estrellitas por tres razones:

1. Porque no me queda más remedio
2. Porque las chicas parecen pin-ups y me encantan!
3. Porque siempre mola ver a Brad Pitt.

Este director tras trabajar en animación durante toda su carrera, esta vez nos presenta a actores como Pitt y Byrne, en una película con una historia muy original pero muy poco aprovechada.
Aprovechando el tirón de Rogert Rabit nos presenta este film mezclando dibujos con personas reales.
Lo mejor: Su sensualidad y oscuridad.
Lo peor: Aun siendo mas novedosa que Rogert Rabit no termina de estar bien hecha, cierto es que no se empleó el mismo presupuesto.
Mejor escena: La ciudad transformándose.