Hermanos de sangre (Miniserie de TV)

Hermanos de sangre fue una serie que encontré por casualidad en filmaffinity. Una tarde buscando en el ranking de cine de género bélico me topé con ella. Al leer: Steven Spielberg y Tom Hanks - año 2001 - y puntuación 8,5, supe que había encontrado un tesoro escondido por nuestra querida televisión. Esa que estropea todo lo que toca y no lo sabe vender, un ejemplo claro es Lost, serie destrozada por TV1. En fin, a lo que voy.

Lo primero decir que me da mucha rabia haberla visto ya y tan rápido, es decir, es algo que pasa sólo una vez en la vida, que la segunda vez que la ves no es lo mismo, y encima sólo son 10 capítulos.

Al principio te haces un lío con los nombre y las caras en general, es difícil relacionarlos, exceptuando al Capitán Winters, el protagonista de esta miniserie y capitán que a todo soldado le gustaría tener al mando y a su lado en la guerra. Por lo menos a mi sí.
Por otro lado, hay momentos en los que por fin te has aprendido el nombre de tres o cuatro y en ese instante se los cargan...

Creo que fueron chicos listos. Si vas a la guerra, que sea con los mejores. No se en que capítulo decía que se habían alistado porque en el frente preferían tener a un compañero a su lado que supiese que iba a dar la vida por él, que a un recluta muerto de miedo sin saber que hacer. Se puede ver que lo que más les importa es volver a casa con vida. Lo del patriotismo queda fuera.
Me ha encantado la serie de principio a fin. El primer capítulo en el que salen a modo de "Oficial y caballero" o "La chaqueta metálica"(no tan a lo bestia), como empieza cada capítulo con esa gran BSO, los momentos en los que oyes "¡SANITARIO!" que se te pone la piel de gallina esperando ver alguna barbaridad encarnizada, ese momento del campo de concentración nazi; para mi el momento más duro de la serie, y un sin fin más...(en spoiler)

Steven spielberg y Tom Hanks nos presentaron en 2001 esta impresionante y magnífica miniserie que narra la historia real de la compañia aerotransportada "Easy", desde que saltaron en Normandía el dia-D (6 de junio 1944) hasta llegar a Austria pasando por Francia, Bélgica, Alemania..
Con la misma estética y realismo que "Salvar al soldado Ryan" narra los combates de una forma extremadamente cruel y realista, creo que incluso más que cualquier película o serie producida hasta la fecha. Dejando aparte el realismo cabe a destacar la genial y extensa plantilla de personajes y sus respectivos actores, algunos sencillamente magistrales como el Cap. Sobel (aunque aparezca poco) y el soldado Winters.

Una compañía que, al igual que otras muchas, hizo historia en la guerra que (desgraciadamente) más récords a batido en la historia de la humanidad.
44 millones de soldados y civiles murieron en el bando aliado y 11 millones en el eje.
Supongo que los 44 millones de aliados murieron por mejor el mundo y por que reinara la paz. ¿Consiguieron su objetivo o acaso murieron en vano?
Unos 20 años después de que terminara esta sangrienta guerra los americanos se lanzaron muy convencidos a Vietnam para librarla del comunismo "malvado", y el resultado no fue precisamente la victoria.
Actualmente tenemos que soportar ver en los telediarios como aún siguen muriendo civiles y soldados en palestina por culpa de esa maldita palabra que tanta muerte arrastra tras de si, la guerra.

Una auténtica obra de arte, ya se ha dicho todo lo que se tiene que decir de ella.

Sin embargo, quizás al principio -a partir del salto en paracaídas hasta su paso por Bélgica- se hace un poco complicado seguir quién es quién solo por los nombres, pues a pesar de la introducción hecha en el primer capítulo (para mí una de las claves del éxito de esta serie reside en ese primer capítulo introductorio en el campo de entrenamiento), son demasiados nombres y te haces un pequeño lío pensando en quién ha sido herido y quién ha muerto....para solucionar esto en algunas ocasiones Spielberg y Hanks hacen un repaso de los que quedan, a modo de reflexión personal de algún narrador en primera persona, pero aún así bajo mi punto de vista no solucionan del todo el problema.

De cualquier modo, para mi esto no es excusa suficiente para bajar la puntuación a un 9, por lo que la dejo en un 10.

"Hermanos de sangre" es lo que ocurriría si convirtiéramos "Salvar al soldado Ryan" en una miniserie de tv.

Las bondades de la misma son enormes: guiones documentados y bien escritos, actores que se toman en serio sus papeles, una fotografía digna de un filme de Hollywood... y un presupuesto (presumiblemente elevadísimo) que permite plasmar la II con impactante veracidad.

Series así elevan sobremanera el listón de la tele y nos hacen esperar futuras joyas producidas por Spielberg en formato televisivo.

Hermanos de sangre es una digna obra bélica cuidada con mimo cuyo fin original era la de perdurar en el futuro como una de las más grandes súper producciones de calidad jamás realizadas para la televisión. Y lo cumple. Vaya si lo cumple. Como a día de hoy sigo sin tener ni idea de lo que es el puto emule, hará unos dos años que compré el pack y pude alimentar mi imaginación con los rostros de nuestros queridos abuelos, los tipos más irascibles y que más estopa repartieron durante el siglo XX.

A ratos me conmovió, a ratos me sedujo, por capítulos me desencantó y por otros, en cambio, volví a pegar un brinco mientras me estaba quedando traspuesto. Hay que tener en cuenta algo fundamental para poder valorar esta magna obra desde una perspectiva más amplia: tito Spielberg estaba ahí. Por tanto, no es de extrañar que se alternen capítulos muy buenos con otros que se ve a la legua son puro relleno insustancial destinado a alargar en más metraje la serie para reventar las arcas con total comodidad y, añadiría, impunidad.

Aunque reconozca que en muchos de sus pasajes me parece desigual, la obra compacta adquiere para el observador un tono dulzón con un cierto amargor que, pese a notarse, tampoco interfiere en demasía sobre la monumental obra que se nos ha mostrado. Para un servidor, tanto los capítulos de intendencia como los de la victoria adolecen de la misma chispa interior que nos hace estremecernos en muchos de sus fragmentos. Aún y todo, le concedo con nota el esfuerzo realizado aunque haya sido supervisado fotograma a fotograma por el tito Spielberg. No podía tenerlo todo.